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 sábado, 26 de febrero de 2005  
El chico le ganó al achique
Independiente perdió 1 a 0 con Lanús
En un partido vibrante, los granates se impusieron con lo justo al rojo, que todavía no pudo ganar

Con un gol convertido por el delantero Román Díaz en el primer tiempo, y una gran actuación de su arquero Carlos Bossio, Lanús venció anoche como visitante a Independiente por 1 a 0 y se convirtió en único puntero del torneo Clausura, aunque en forma momentánea.

Con este resultado, el elenco granate quedó al tope de las posiciones con 7 puntos, uno más que River Plate y Estudiantes, aunque éstos tienen un partido menos.

Electrizante, de ida y vuelta, pleno en emociones y en situaciones de peligro. El partido no dio respiros, sobre todo en el primer tiempo, cuando ambos equipos se alternaron el dominio de las acciones y brindaron un espectáculo que, más allá de cualquier resultado, cumplió con creces respecto a uno de sus principales objetivos: el entretenimiento.

Y mucho tuvieron que ver seguramente los planteos ultraofensivos que dispusieron los entrenadores César Luis Menotti y Néstor Gorosito, a punto tal que ese argumento también se convirtió en su peor pecado.

Porque cometieron tantos descuidos defensivos -un error claramente visible, sobre todo, en la última línea del Rojo- que terminaron convirtiendo la estrategia del achique en una "chiquilinada", que finalmente le costó el 0-1 a los locales.

Hasta ese momento, Independiente se había mostrado dominador y mucho más equilibrado respecto de sus anteriores presentaciones, con un mediocampo sólido con el trinomio Pusineri-Carrizo-Biglia y con rendimientos individuales en ascenso, como los casos del Turu Flores y de Cangele.

Pero Gorosito, conocedor de las históricas mañas defensivas de los equipos dirigidos por Menotti, acertó con su estrategia de contragolpe veloz, a tres toques, y con pases a las espaldas de los laterales locales Martínez y Eluchans.

De esa manera se gestaron las mejores situaciones para el granate: Román Díaz se lo perdió a los 10' tras ganarle la espalda a Martínez y repitió la acción, pero por el sector izquierdo, a los 24 minutos.

Y un minuto más tarde, la tercera ocasión se convirtió en la vencida: Rodrigo Díaz metió un pelotazo cruzado para su hermano Román, quien volvió a sorprender por la derecha y con un remate cruzado puso el 1 a 0.

Antes y después de esa jugada, el rojo desperdició varias chances claras para anotar.

Lanús también pudo ampliar la diferencia con un cabezazo de Romero, una media vuelta de Fabbiani y un disparo de Román Díaz. El espectáculo fue brillante, la labor defensiva de los equipos, bien opaca.

En el complemento, Independiente acorraló a Lanús y, por momentos, metió diez jugadores en campo rival, pero no acertó en la definición -la más clara la tuvo Frutos, pero la pelota rebotó en el palo- y encima se encontró con una gran actuación del arquero, Carlos Bossio, la figura de la cancha. (Télam)
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