La selección enfrenta a Catalunya

La enorme cantidad de bajas de último momento en la selección catalana, sumada a la negativa de los principales clubes europeos a ceder a los mejores argentinos, influyeron para que hoy el amistoso entre ambas selecciones termine siendo entre equipos alternativos sin las principales figuras.

Durante la conferencia de prensa posterior al levísimo entrenamiento de los 18 jugadores argentinos en el Camp Nou, sede del partido, el entrenador argentino José Pekerman admitió ayer que está conforme con el plantel con el que cuenta, "debido a los compromisos de otros jugadores, la falta de tiempo de preparación y lo reacio de los clubes argentinos para ceder a sus figuras".

Muy parecido fue lo que dijo inmediatamente después Angel Pichi Alonso, entrenador de la selección catalana. Reconoció que hasta ayer tenía una alineación en la cabeza, y acotó: "Pero como siguen cayendo jugadores en cama, debo replantearme todo otra vez". Informó que, además de Albert Luque, también Jordi tendrá problemas para estar presente, por lo que fueron convocados de urgencia el defensor del Manchester United Gerard Piqué y el delantero del Espanyol de Barcelona Jonathan Serrano.

El equipo argentino se movió levemente en el Camp Nou con dos equipos de nueve jugadores cada uno, bajo una temperatura muy fría y cuando ya estaba anocheciendo. Posteriormente hizo ejercicios también el seleccionado catalán.

Ambos entrenadores aceptaron que, en definitiva, se trata de un partido entre equipos B, si bien Alonso admitió que la alineación argentina "es muy fuerte y es un plantel que tiene hasta cuatro conjuntos competitivos para jugar al mejor nivel".

La selección juega para cumplir.