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 viernes, 14 de noviembre de 2003

Tiempo jurídico

Los tiempos jurídicos (y por ende la lógica jurídica), al margen de las dificultades reales, son abismalmente diferentes para los adultos que para un menor atrapado en la espera de una decisión "justa". Quisiera argumentar ciertos tiempos "biológicos" para tener en cuenta a la hora de juzgar. El proceso de maduración de la zona prefrontal, de la corteza cerebral, capaz de realizar un "juicio racional", tarda aproximadamente 20 años, esto hace que el sistema límbico (hipocampo, amígdalas y cuerpos mamilares), dispare sin freno, las emociones y "reacciones" de miedo, espanto y rabia. Además la "mielinización" también es tardía. Me refiero a una especie de forro de cables, que permite la interconexión de las neuronas . A esto se suma que las respuestas racionales dependen del grado de desarrollo sexual u hormonal, por lo que las mujeres generalmente lo alcanzan en tiempos más tempranos que los varones. La resonancia magnética, hoy popularizada por el "neuromarketing", para detectar cómo inciden las percepciones en las elecciones de marcas publicitadas, se podría utilizar para comprobar la gran influencia del medio sobre el cerebro de los niños y adolescentes. ¿A quién se juzgaría entonces? ¿A los estimuladores de imágenes inductoras de violencia, a los fabricantes de juegos que entrenan para matar, a los que enseñan a competir y "reventar" al compañero, a los que promueven sustancias que los distancian de una realidad que no pueden metabolizar, a los que lucran con la ignorancia y les convienen ciertas pobrezas, a los padres o al Estado, que no se hace cargo del menor? En estos días se estrena el film de Nikki Reed, púber de trece años que actúa su propio guión (vivencial no imaginario), donde ilustra las maneras de fumar marihuana, ser borracha, anoréxica y promiscua con el sexo, además de escaparse del colegio y ser infiel hasta con sus amigas... Todo menor transgresor, tiene derecho a ser diagnosticado antes de ser "penalizado", no sólo constatando sus lesiones neurológicas (anatómicas o funcionales), también explorando las noxas del medio y tiene derecho a ser "re-educado" (no "re-domesticado").

Mirta Guelman de Javkin



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