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 domingo, 12 de octubre de 2003

Las heridas abiertas por Colón el 12 de octubre de 1492 siguen vigentes
Aborígenes avivan la controversia del Descubrimiento con viejas demandas
Dirigentes de 19 comunidades indígenas recuerdan la "fecha trágica" y conforman una organización nacional

El 12 de octubre es una fecha cargada de significación para los pueblos hispanos. A 511 años del desembarco de Cristóbal Colón, quien la noche del 12 de octubre de 1492 tocó tierra en la isla Guanahaní, que el almirante llamó San Salvador, el rol de los españoles en el descubrimiento de América fue duramente cuestionado durante muchas décadas, y en la actualidad se tiñe de sombras.

El rechazo a la conquista fue uno de los ejes del revisionismo histórico, que no se detuvo allí ni (en el caso de Argentina) la muy posterior Campaña del Desierto, porque el exterminio de los indígenas se mantuvo hasta el siglo XX a manos de mercaderes y estancieros.

Para los dirigentes aborígenes argentinos, es una fecha trágica. Este nuevo aniversario fue aprovechado ayer para constituir en la Capital Federal la Organización de Naciones y Pueblos Indígenas en la Argentina (Onpia), una dirección nacional de las 19 comunidades aborígenes del país.

Este año los pueblos originarios producirán múltiples manifestaciones en el territorio argentino para hacerse escuchar, que van desde la conformación de la organización que los agrupe a nivel nacional, como las reuniones de base entre los mapuches o los tupí guaraní en el norte, hasta el ya habitual contrafestejo de todos los años frente al Congreso Nacional.

Los dirigentes indígenas, algunos de amplia trayectoria en el país y en el exterior, como es el caso del mapuche Víctor Capitán (vicepresidente del Fondo Indígena, organismo multilateral de todo el continente), tienen que demostrar a propios y extraños la capacidad para llevar a buen puerto el proceso difícil de unificación de los 19 pueblos, un hecho que carece de antecedentes históricos.

Frente a este nuevo 12 de octubre muchos dirigentes indígenas se preguntan, como el rankulche German Canhué, cuándo tendrán ellos el mismo trato que los piqueteros y el presidente Néstor Kirchner los reciba para tener un diálogo franco, refieren los representantes aborígenes.

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Tehuelches junto a autoridades en Ushuaia, en 1884

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