Año CXXXVI Nº 48167
La Ciudad
Política
Economía
Información Gral
Opinión
La Región
El Mundo
Policiales
Cartas de lectores


suplementos
Ovación
Escenario
Señales
Turismo
Mujer


suplementos
ediciones anteriores
Educación 04/10
Campo 04/10
Salud 01/10
Autos 01/10


contacto

servicios

Institucional

 domingo, 05 de octubre de 2003

analisis
El peronismo, Zelig y el caballo de Troya

Mauricio Maronna / La Capital

Néstor Kirchner evalúa los costos de no convertirse en el caballo de Troya, aquel gigante de madera que Ulises utilizó como ardid para engañar a los troyanos. Ocultos en su interior iban los guerreros griegos, quienes les facilitaron a los suyos la entrada a Troya.

"Cuando me ofrecieron ser candidato a presidente me di cuenta de que querían esconder en mi panza a lo peor del justicialismo. Como el caballo de Troya, claro", admitió entre unos pocos cercanos Carlos Reutemann, en lo que constituyó una clave para desentrañar la frase mítica con la que se corrió del camino hacia la Casa Rosada: "Vi algo que no me gustó".

La notable adhesión popular que recibió Kirchner en poco más de cuatro meses de gestión (habiéndose colocado la banda con el 22% de los votos) habilitó en el ámbito de la politología un debate que nadie sabe hasta dónde continuará. La idea de instalar la transversalidad, no sólo a la hora de los discursos, sino cuando el jefe del Estado se decida a retocar su gabinete pone los pelos de punta al peronismo clásico, que enfoca todas sus miradas hacia Eduardo Duhalde.

"¿Sabe a qué me recuerda?, a cuando escuchábamos aquello de «¿y ahora quién podrá defendernos? Yo, el Chapulín Colorado». Pero no se dan cuenta de que el Negro (por Duhalde) no es el Chapulín: le sobra astucia y conoce que no es momento de patear ningún hormiguero", fue el chispeante parangón que utilizó un influyente operador político nacional.

El santacruceño está tironeado entre quienes le aconsejan que rompa con lo que él denominó "pejotismo" y utilice el respaldo popular para construir un nuevo espacio. Algo así como un Tercer Movimiento Histórico a la peronista.

"No creo que el Lupo haga eso. Al fin de cuentas el PJ tendrá el 10 de diciembre 18 provincias, más de 130 diputados nacionales y 40 senadores", dice la fuente, que admite que "lo de Santa Fe fue una prueba de laboratorio que a los pingüinos fundamentalistas le salió mal".

En esa escuadra ubican al jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y al secretario de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde. "Cuando vieron la elección de Lole varios se quedaron pálidos. Le pasó el trapo a (Hermes) Binner (sic), cuyo triunfo en la provincia era fundamental para demostrar que el transversalismo no era una cuestión onanística", narra el informante. El peronismo es como Zelig, ese personaje interpretado por Woody Allen que se mimetizaba con sus interlocutores. O como sostenía un ex presidente mejicano en referencia al PRI: "No somos de derecha ni de izquierda sino todo lo contrario".

"A Binner me gustaría traerlo para acá", fueron, sin embargo, las siete palabras que un altísimo funcionario del gobierno nacional le escuchó decir al presidente, quien mantiene en alto la bandera de incorporar a extrapartidarios. "Es posible que si el Gallego (por Ginés González García) se va de embajador a España, Binner pueda ser el futuro ministro de Salud. Eso sí, avísenle que se va a tener que comer, como todos nosotros, una cuota de humillación diaria", amplió el ministro a La Capital.

La "cuota de humillación diaria" hace referencia al carácter volcánico de Kirchner, quien no se priva de retar a sus ministros en forma destemplada o negarles el diálogo por varios días cuando algo no le gusta. Según el diario Clarín, durante la campaña electoral Cristina Kirchner y Alberto Fernández intentaron esbozar una crítica sobre su declaración de reestatización de los servicios ferroviarios. Rojo de ira, Kirchner ensayó la contraofensiva: "¡Cristina, vos te vas a Santa Cruz! ¡Y a vos, Fernández, no te quiero ver más!".

Anécdotas al margen, el jefe del Estado encontró éxito en su estilo abanico de ejercer el poder. Todos los frentes que abrió le dieron resultado. Haber recompuesto el vínculo entre política y sociedad es un beneficio que se derrama sobre la dirigencia que hasta hace pocos meses atrás no podía salir a la calle por temor a los escraches.

El derrumbe de la oposición provoca en algunas usinas mediáticas el desesperado intento de descubrir eventuales "polos de centroderecha" que le ofrezca pelea al justicialismo, amo y señor de la actual geografía del poder.

En ese bloque intentaron hacer confluir a Reutemann, Mauricio Macri y Ramón Puerta. El Lole se ríe a la distancia de las especulaciones: el jueves volvió a mandar señales de que lejos está de transformarse en cabecera de playa de un apresurado zafarrancho de combate contra el santacruceño. "El país vuelve a sentir esperanzas y la economía presenta signos de reactivación", dijo en Rafaela. Sin embargo, no debe obviarse que el PJ santafesino bate tambores de guerra ante el desembarco del intendente rosarino en la Rosada.

Los relevos de los jefes de las policías Federal y Bonaerense son una muestra del intento de cambio de las peores postales. Que quienes tenían a su cargo la defensa de la seguridad y la hacienda de los habitantes de dos de los principales distritos del país utilizaran sus jinetas para direccionar licitaciones o fugar capitales a paraísos fiscales son evidencias de un país atrofiado institucionalmente.

Desde el 10 de diciembre la gestión Kirchner será observada con una lupa focalizada en los temas urgentes que ya no pueden esperar: los índices de desempleo, la pobreza y la ausencia de un horizonte económico concreto.

Mientras llega ese momento (y aunque aún no sea tiempo de hacer apologías o críticas despiadadas al promocionado estilo K), está bien abrir todas las ventanas necesarias que sirvan para despejar el mal olor que despiden ciertos nichos de poder.

Bastiones infranqueables para los gobiernos que, desde el 83, fueron caballos de Troya que ocultaron en su panza a corruptos, cómplices e inútiles. Un mix explosivo que hizo volar a la Argentina por los aires.

enviar nota por e-mail

contacto
buscador

Notas Relacionadas
El show del chiste, de Videomatch al Concejo


  La Capital Copyright 2003 | Todos los derechos reservados