Entrevista con el Director adjunto de la OIT

Ping pong con Javier González Olaechea

-¿Cómo se encuentra la Argentina en materia de condiciones de empleo?

-La crisis trajo inconvenientes, que pese a los enormes esfuerzos de la sociedad y del gobierno anterior y este gobierno no se han podido superar. De manera que la OIT considera que hay esfuerzos muy bien encaminados, que acompañamos desde lo técnico con la cooperación, pero que siempre nos hacen pensar que la inmediatez, la urgencia, es lo que importa en una cantidad de actividades.

-¿Cuál es la situación del trabajo informal en el mercado laboral argentino?

-La realidad en la Argentina sobre el trabajo informal no es muy distinta al resto de América latina. Si tuviéramos que buscar los ponderados o promedios por lo menos seis de cada diez nuevos trabajos que se crean lo hacen en el sector informal, sin ninguna protección social, sin ningún acceso a la seguridad y por cierto, en condiciones, en la gran mayoría de los casos, de indignidad. De manera que no solamente hay que trabajar intensamente para formalizar el trabajo informal sino también para acercar el trabajo formal al informal mediante capacitación, cooperación, créditos, disposicones administrativas, regulatorias. Es una tarea en marcha que encontramos que fue bien enfocada en su inicio por este gobierno.

-¿Cuáles son los métodos que aplica la OIT para capacitar tanto a empresarios como a trabajadores en mejorar las condiciones de trabajo?

-Son muchas. En primer lugar la cooperación técnica en la que se sustenta una gama de estudios de la OIT parte del principio de la observación directa, cuantificable de la realidad. Nosotros como organización a nivel mundial hemos hecho estudios de acceso público en los que se puede verificar esto. De ahí se han diseñado recomendaciones, guías técnicas, programas específicos, que en algunos casos respondieron a realidades muy puntuales y en otros casos de una manera genérica. En la Argentina lo que tenemos son programas de cooperación que están creciendo enormemente.

-¿Cómo se convence al empresario de que los fondos que se aplican a seguridad e higiene laboral no son un costo sino una inversión?

-En primer lugar con una reflexión de carácter filosófico, humano. Cuando uno conversa con un empresario y éste se da cuenta de que se está hablando de personas y no de cifras, evidentemente toda otra consideración es secundaria. Pero además se añaden en las consideraciones resultados de los estudios de la OIT, donde demuestran claramente que cuando se aplicaron metodologías en favor de la seguridad e higiene del trabajo claramente han repercutido en la productividad de las empresas.

El funcionario de la OIT, González Olaechea.