Año CXXXVI
 Nº 49.813
Rosario,
martes  15 de
abril de 2003
Min 14
Máx 23
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Guerra en el Golfo. La Casa Blanca: "Es ciertamente un Estado hostil"
EEUU trata a Siria de la misma forma que a Irak antes de invadirlo
La CIA presentó presuntas pruebas sobre armas químicas y Powell amenazó con sanciones económicas

Washington/Damasco. - Estados Unidos aumentó ayer sus presiones sobre Siria, señalando tener pruebas sobre la posesión de armas químicas por parte de Damasco, en una escalada de tensiones que comenzó a preocupar a los países árabes y que llevó a Gran Bretaña a desmentir que existan planes para una nueva guerra. "Siria, ciertamente, es un Estado hostil", afirmó ayer la Casa Blanca, como para que no quedaran dudas.
El portavoz de la Casa Blanca, Ari Fleischer, destacó que la CIA entregó ayer un informe al Congreso en el que se prueba que Siria tiene armas químicas. Además, instó al gobierno de Damasco a no proporcionarle refugio a miembros del régimen iraquí y a no continuar respaldando a terroristas.
Las autoridades en Damasco deben "reflexionar seriamente sobre cuál es el rol que Siria quiere tener en el futuro en el mundo", manifestó el portavoz.
A la pregunta de si Siria es el próximo país en la "lista de objetivos" estadounidenses, Fleischer respondió: "Les puedo decir quién es el próximo en la lista de objetivos: Irak. Todavía no finalizamos nuestra acción militar allí, y está pendiente la reconstrucción. Ese es nuestro próximo objetivo".
El secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, reiteró las advertencias que lanzara el fin de semana el presidente George W. Bush y dijo que Siria puede "sufrir problemas" en su relación diplomática con Estados Unidos y consecuencias económicas si no coopera con los esfuerzos norteamericanos para encontrar a los funcionarios del régimen de Saddam Hussein. "Desde luego examinaremos posibles medidas", dijo en una conferencia de prensa con el ministro del Exterior de Kuwait, Mohammed Al Sabah.
Desde el inicio de la guerra en Irak, el secretario de Defensa estadounidense, Donald Rumsfeld, viene afirmando que Siria ha entregado material militar a Irak y luego dijo que Damasco había permitido que altos dirigentes huyeran a su territorio.
Rumsfeld sostiene que existen informaciones sobre ensayos sirios de armas químicas en los últimos 12 a 15 meses. Sin embargo, Bush aclaró que esto no implica necesariamente medidas bélicas contra Siria, pues "cada situación requiere una respuesta diferente".

Blair: no hay planes de invasión
Ante este panorama, el primer ministro británico Tony Blair rechazó categóricamente los "rumores salvajes" sobre una posible invasión a Siria en su intervención ante el Parlamento británico. "No hay planes para una invasión a Siria", aseguró.
El primer ministro afirmó que este fin de semana el presidente sirio, Bashar el Assad, le aseguró en conversación telefónica que las autoridades de Damasco "prohibirían" que se diera cobijo a altos funcionarios iraquíes. Acerca de las afirmaciones de Estados Unidos sobre una posible posesión de armas químicas por parte de Siria, Blair tan sólo dijo que ese país no ha firmado los acuerdos internacionales sobre la prohibición de este tipo de armas. Más allá de las afirmaciones de la administración Bush, es ampliamente conocido en ambientes de defensa que Siria, como muchos otros países, tanto aliados como adversarios de EEUU, posee armas químicas.
Al igual que Blair, los ministros del Exterior y de Defensa británicos, Jack Straw y Geoff Hoon, respectivamente, rechazaron que existan planes militares para atacar Siria cuando finalice la guerra en Irak. Straw negó en Bahrein que exista una lista de países para ser atacados por Estados Unidos después de Irak en la lucha de Washington contra el terrorismo. "No vamos a ir tras ningún país. Siria tiene que contestar muchas preguntas importantes y empezar una agenda de discusiones", demandó Straw.
En tanto, Bush pidió al jefe del gobierno español, José María Aznar, que interceda ante los países árabes para que Siria no se convierta en "refugio de indeseables". Bush realizó la petición de ayuda a Aznar en vista de las tradicionales buenas relaciones entre España y el mundo árabe.

La respuesta de Damasco
La respuesta de Siria no tardó. "Nunca hubo cooperación entre Damasco y Bagdad, nuestro respaldo fue para el pueblo iraquí que ha sufrido las vicisitudes de la guerra", declaró la portavoz de la cancillería siria, Buthaina Shaaban.
"Le decimos a él (George W. Bush) que Siria no tiene armas químicas y que las únicas armas químicas, biológicas y nucleares que hay en la región son de Israel, que está amenazando a sus vecinos y ocupando sus territorios", dijo Buthaina Shaaban. Shaaban declaró que Damasco no considera la andanada de acusaciones como una "amenaza".
El domingo, el ministro de Relaciones Exteriores sirio, Faruk al Sharah, rechazó las críticas de Washington. A la par, la cúpula siria advirtió que Israel será objetivo de sus ataques si Estados Unidos se decide a lanzar una invasión contra su país.
Las advertencias de Estados Unidos, que causaron enorme inquietud en el mundo árabe, encontraron en cambio amplio eco en Israel, donde el ministro de Defensa, Shaul Mofaz instó a Damasco a expulsar a grupos extremistas palestinos, así como a poner fin a la milicia libanesa Hezbolá. Este grupo es el mismo que Argentina acusa de haber cometido o participado, con apoyo de Irán, de dos atentados explosivos en 1992 y 1994 contra objetivos israelíes: la embajada y la mutual Amia. (DPA y Reuters)



El canciller de Kuwait con Rumsfeld en Washington.
Ampliar Foto
Notas relacionadas
Es un objetivo más político que militar
Lula: "Bush es un alucinado"
Diario La Capital todos los derechos reservados