Año CXXXVI
 Nº 49.813
Rosario,
martes  15 de
abril de 2003
Min 14
Máx 23
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Guerra en el Golfo. La cuna de Saddam y su clan cayó casi sin combates
Con la toma de Tikrit la campaña militar quedó técnicamente terminada
Los marines coparon ayer la última ciudad importante que aún estaba en manos del régimen caído

Tikrit, Irak. - Marines estadounidenses culminaron ayer la toma del último bastión de fuerzas leales a Saddam Hussein, al ocupar Tikrit, ciudad natal del derrocado líder, en una acción que selló la victoria británico-estadounidense en la guerra contra Irak.
Comandantes estadounidenses dijeron que la caída de Tikrit, 177 kilómetros al norte de Bagdad, colocó la guerra de 26 días en un punto de transición. Blair, el principal aliado de Washington, dijo que "estamos cerca del fin del conflicto".
Los marines asaltaron Tikrit al amanecer tras un fiero bombardeo a posiciones de la Guardia Republicana, el cuerpo de élite de Hussein que ha presentado a lo largo de la guerra una ínfima resistencia, comparado con lo esperado.
Varios helicópteros artillados Cobra volaron a baja altura sobre un distrito y dispararon ametralladoras pesadas contra focos de resistencia, mientras patrullas de marines peinaban un enorme palacio presidencial en busca de partidarios del derrocado gobierno.
La resistencia fue menor a la esperada, pero no se observaron las señales de júbilo que se vieron tras la caída de otras ciudades iraquíes. Ocurre que la pequeña Tikrit fue, durante los casi 30 años de poder absoluto de Saddam Hussein, la ciudad iraquí más beneficiada a la hora de recibir fondos y obras públicas. Muchos de sus habitantes fueron miembros de la élite gobernante bajo Saddam. Una resplandeciente estatua de Hussein montado a caballo se mantenía intacta y fotos del derrocado líder adornaban los postes del tendido eléctrico. Hussein siempre parangonó, en la retórica oficial de su régimen, su origen en Tikrit con Saladino, el gran conquistador árabe de la Edad Media que también nació en esta ciudad.
Sin embargo, algunos residentes hicieron la señal de la victoria y dijeron sentirse satisfechos por el hecho de que la guerra parecía llegar a su fin.
"Es un gran alivio. Nos consideramos gente pacífica que estaba atrapada con un dictador. Esperamos tener un líder que respete al pueblo y lo deje vivir en paz", dijo Hussein Al Khalidi, de 58 años.
El paradero de Hussein, quien nació en una aldea cercana a Tikrit en 1937, sigue siendo desconocido.
El general de brigada estadounidense Vincent Brooks, dijo en el cuartel general de la guerra en Qatar que aún existía la posibilidad de combates, pero que no sera un "esfuerzo organizado del régimen". Las tropas estadounidenses creen ahora que las grandes amenazas pueden ser emboscadas de seguidores de Hussein o de algunos combatientes extranjeros.
En Bagdad, la normalidad parecía regresar lentamente, tras tres semanas de ataques aéreos que fueron seguidos por cuatro días de anarquía. Algunas tiendas abrieron y el tráfico comenzó una vez más a congestionar las calles.
Pero todavía podían oírse disparos ocasionales a la distancia y, con el suministro de la energía y el agua todavía interrumpido, cientos de manifestantes iraquíes se lanzaron a las calles para quejarse de la falta de seguridad y de servicios públicos.
"¡Estado islámico! ¡Estado islámico! ¡No estadounidense! ¡No estadounidense!", corearon decenas de manifestantes.
* En la ciudad central de Nayaf, dirigentes tribales pusieron fin a un cerco de hombres armados sobre la casa del líder shiíta y Gran Ayatollah Ali Sistani, y tomaron el control del centro espiritual donde dos clérigos fueron asesinados con armas blancas la semana pasada.El asedio encendió las pasiones en el corazón de la comunidad shiíta, la mayor de Irak, y fue un indicio de lo difícil que podría ser forjar una unidad nacional tras la guerra.
* Los planes para formar una administración liderada por Estados Unidos en Irak serán puestos a prueba hoy, cuando funcionarios estadounidenses y divididas facciones iraquíes se reúnan en la sureña ciudad de Nassiriya.
"Nassiriya será la primera reunión de iraquíes y es un caso de prueba", dijo Nathan Jones, portavoz de la Oficina de Reconstrucción y Asistencia Humanitaria, encabezada por el general retirado Jay Garner.
El primer ministro británico dijo que esperaba que Irak pueda celebrar elecciones dentro de un año para que se establezca en el país un gobierno interino. (Reuters)



Una estatua de Saddam, intacta en el centro de Tikrit.
Ampliar Foto
Diario La Capital todos los derechos reservados