Año CXXXVI
 Nº 49.761
Rosario,
sábado  22 de
febrero de 2003
Min 18º
Máx 29º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





La explosión de una barcaza con 100.000 barriles de gasolina hizo temer un atentado
Otro día de pánico en Nueva York
El FBI y la Casa Blanca hablaron de "accidente". La ciudad vive bajo alerta "muy elevada" desde 2001

Nueva York. - La explosión de una barcaza cargada de gasolina en una refinería cerca de Staten Island (uno de los cinco barrios de Nueva York), reavivó entre los neoyorquinos el temor a un nuevo atentado terrorista por la crisis iraquí. El saldo provisorio es de un muerto, un herido grave y dos desaparecidos. La explosión cubrió de enormes columnas de humo negro el cielo a 25 kilómetros de Mahattan y provocó pánico en Wall Street, donde se disparó el precio del petróleo. Desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, Nueva York vive bajo estado de alerta "muy elevado". Tanto el FBI como la Casa Blanca desestimaron la hipótesis de atentado y se inclinaron por un accidente.
Miles de neoyorquinos atemorizados siguieron durante la jornada los reportes por la radio o la televisión ante el temor de que se tratara de un nuevo atentado, tras los ataques del 11 de septiembre de 2001 contra las Torres Gemelas y el Pentágono. La explosión ocurrió a las 10,10 (hora local) en una refinería situada en un canal marítimo conocido como Arthur Kill, entre Staten Island y and Nueva Yersey. El jefe del departamento de bomberos, William Van Wart, confirmó que la explosión ocurrió mientras se transfería un producto petrolero con la barcaza.

100 mil barriles ardiendo
En principio funcionarios del departamento de incendios de Nueva York dijeron que la barcaza transportaba gas propano o combustible para calefacción en la terminal propiedad de Exxon Mobil Corp (XOM.N), pero la compañía, la mayor petrolera del mundo, dijo luego que era gasolina. La barcaza transportaba 100.000 barriles de gasolina sin plomo y la explosión se produjo durante su descarga, indicó Exxon en un comunicado. Trabajadores de la refinería dijeron que otra barcaza estaba siendo cargada en el momento de la explosión, pero esto no fue confirmado por la empresa.
Arthur Kill es un corredor de agua situado entre Nueva Jersey y Staten Island, en el que se han ubicado las grandes instalaciones de la industria petroquímica cercanas a Nueva York, precisamente para evitar que los barcos y contenedores con materiales altamente combustibles estén en lugares altamente poblados. Los oleoductos que salen de los depósitos de la refinería abastecen a casi todo el noreste de Estados Unidos, además de a los tres aeropuertos internacionales de Nueva York.
Exxon señaló que contrató a la empresa Clean Harbors para que haga una limpieza ambiental. "Clean Harbors comenzará su trabajo luego que el fuego sea extinguido y las autoridades den la autorización", se expresó en un comunicado.
La Casa Blanca expresó que no tiene "ningún indicio" de que haya una acción terrorista detrás de la explosión de la refinería. "En este momento, no tenemos ninguna indicación de que se trate de otra cosa que no sea un serio accidente industrial", comentó por la tarde el portavoz de la Casa Blanca Ari Fleischer. En tanto, el vocero de la policía de Nueva York Michael O'Looney informó que tres horas después del incendio fue retirado del agua el cuerpo de uno de los trabajadores de la petrolera Exxon, mientras que otro empleado permanece desaparecido y uno en estado de gravedad.
En la misma línea el Buró Federal de Investigaciones (FBI) descartó, en primera instancia, que se trate de un atentado terrorista y se inclinó por la hipótesis de un accidente. El jefe del Departamento de Bomberos de Nueva York, William Van Ward, una chispa eléctrica podría haber iniciado el fuego.
"No hay necesidad de pensar otra cosa que que se trató de un incidente industrial muy trágico", comentó el alcalde Michael Bloomberg un par de horas luego de la explosión, quien al referirse a los desaparecidos reconoció: "Tememos lo peor". Unas 30 personas trabajan en ese momento en la terminal.
El alcalde agregó que la mitad del combustible ya había sido transferido al momento de la explosión, pero aclaró que no hay forma de determinar cuánta gasolina ardió, cuánta se evaporó o cuánta todavía está en la barcaza. Inmediatamente después de la explosión, una densa nube de humo de cerca de 100 metros de altura era visible incluso desde el centro de Manhattan.
Numerosas viviendas cercanas a las instalaciones fueron evacuadas y los habitantes de la zona recibieron la recomendación de cerrar las ventanas de sus viviendas y no salir a la calle. (AFP, Reuters, DPA y Télam)



Una densa columna de humo cubre la refinería de Exxon.
Ampliar Foto
Notas relacionadas
El espectro del 11-S recorrió Staten Island
Viviendo en estado de alerta "muy elevado"
Un estruendo que hizo subir el petróleo
Diario La Capital todos los derechos reservados