Boca Juniors debutó en la Copa Libertadores con una actuación sin brillo que, sin embargo, le permitió doblegar a Independiente Medellín de Colombia por 2 a 0. El elenco argentino marcó la diferencia en el segundo tiempo, que ambos equipos jugaron con diez hombres por las expulsiones de Guillermo Barros Schelotto y Felipe Baloy, a los 38' de juego.
El primer tiempo resultó equilibrado: el equipo colombiano ejerció un ligero dominio territorial, pero fue Boca el conjunto que generó aproximaciones más serias al arco rival.
Independiente exhibió en esa etapa un manejo de pelota prolijo, ordenado, pero en ofensiva se mostró como un elenco limitado, sin mayores ideas ni profundidad.
Boca comprometió a los colombianos a partir de la conducción de Ezequiel González en el mediocampo y las proyecciones de Matías Donnet por el sector derecho.
El equipo orientado por Carlos Bianchi tuvo varias ocasiones favorables para abrir el marcador como, por caso, un remate de media chilena de Barros Schelotto a los 9', y un disparo de Marcelo Delgado desde la media luna del área a los 19'.
El partido, jugado con intensidad, cobró un tono más áspero a los 38' cuando Barros Schelotto reaccionó ante una infracción que le cometió Baloy y el árbitro brasileño Marcio Rezende resolvió la expulsión de ambos futbolistas.
El complemento fue netamente favorable para Boca, que presionó en forma constante a la endeble línea defensiva colombiana y así encontró numerosas chances de gol.
En una de ellas, y luego de una grotesca acción de los zagueros de Independiente, Ezequiel González tomó la pelota en la puerta del área, definió frente al discreto arquero David González y abrió el marcador.
El conjunto visitante ensayó una reacción, pero sus pretensiones de avanzar sobre el terreno desnudaron sus enormes limitaciones técnicas.
Independiente, aun en este contexto, tuvo una oportunidad óptima para lograr la igualdad cuando Rezende cobró un penal a los 33' a raíz de una mano de Schiavi, aunque Roberto Abbondanzieri contuvo el envío ejecutado por Tressor Moreno.
Otro error grave de la defensa colombiana le permitió a Boca liquidar el partido. Lo hizo Delgado, con un disparo cruzado, en un mano a mano con el arquero, a los 40'.
Fue, en el balance, un triunfo inobjetable, aunque también quedó claro que Boca deberá crecer mucho para sostener sus aspiraciones en el torneo.
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La Ciudad
