Carcarañá. - El vivero municipal de esta ciudad tendrá proximamente carácter regional y formará parte del Programa Social de Bosques (Prosobo). Su objetivo será abastecer a municipalidades cercanas y forestar toda la costa del río Carcarañá en el distrito local. El vivero funciona dentro del Parque Sarmiento y cuenta con una importante producción de ejemplares. Los árboles cultivados en el predio permiten la reposición y forestación de quinientos ejemplares anuales en plazas y espacios públicos de Carcarañá.
Las variedades son diversas y comprenden a ejemplares de lapacho rozado, retoños de palmera y roble que se extraen del Parque Sarmiento, ginkgo biloba -el árbol más antiguo de la tierra y considerado un fósil viviente- obtenido de semillas de montes de la zona, entre otras vistosas especies.
El secretario de Gobierno, Eduardo Di Benedetto, destacó que los cultivos no tienen costo alguno porque las especies son producidas en el vivero y con mano de obra de planes Jefas y Jefes de Hogar. El asesoramiento lo brinda la agencia de extensión del Inta de Roldán y cuenta con subsidios de la Secretaría de Promoción Social de la Nación.
"Queremos transformar a nuestra rivera en una malla forestal que tenga un alto impacto ecológico y turístico, y que a su vez produzca rédito económico para la Municipalidad", adelantó el funcionario. "Con la regionalización del vivero se podrá comercializar e intercambiar especies con otras comunas. Esto será posible al formar parte del Programa Social de Bosques", acotó.
El Prosobo es una actividad permanente de la Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación. Su principal objetivo es el de brindar asistencia técnica y financiera para obras de restauración y aprovechamiento sustentable de las masas forestales nativas y para incrementar el área forestada nacional, favoreciendo a comunidades rurales concentradas y dispersas, y contribuyendo a evitar su desarraigo.
A la vez promueve la sustentabilidad de las actividades forestales que impulsa mediante la autogestión, organización y participación comunitaria, atendiendo las particularidades de los núcleos de población alcanzados y también permite reasignar fondos para impulsar objetivos específicos de alto impacto productivo, ambiental y social, posibilitando multiplicar la efectividad de parte de los fondos dedicados a la asistencia social, como también captar fondos de cooperación con tal fin.
Lajas que visten la ciudad
En el mismo predio donde funciona el vivero se encuentra un obrador para fabricar lajas atérmicas, cercos olímpicos, herramientas y conejeras que se utilizarán en la granja integral que la comuna ha puesto en marcha.
Di Benedetto detalló que para lograr las lajas fue necesario "desarrollar primero la técnica, entrenar a la gente y armar la infraestructura", y recordó que "la máquina que se utiliza fue comprada por una gestión de gobierno anterior y estuvo guardada sin se usada por años, hasta que la descubrimos y la pusimos a producir".
El secretario explicó que "la piedra lavada tiene una técnica especial que requiere tiempo de secado y control de temperatura constante que se logra con estufas. Nuestra producción fue analizada en el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Imaes) y dio muy buenos estándares de resistencia".
También se fabricaron lajas con piedras lavadas del río Uruguay traídas desde Entre Ríos y otras blancas y negras. "La producción se inició en 1995 y se extendió hasta 1999, la mano de obra estuvo a cargo de los planes integrales de trabajo y se lograron unos cinco mil metros de losetas que fueron distribuidas en varios sectores públicos de la ciudad y en el Parque Sarmiento -donde se las puede observar circundando las piletas- dándole un estilo arquitectónico especial y vistoso.
"Gran parte se donaron a instituciones intermedias y aún queda excedente para seguir colocando por varios años", aseguró Di Benedetto. Una parte se utilizará para hacer los senderos de la granja integral. En el predio también se producen las mesas y bancos que brindan comodidad a los visitantes del parque.
También se están construyendo aparatos para ejercicios abdominales con durmientes desechados del ferrocarril que serán colocados para que lo utilicen los deportistas que concurren al parque, en tanto otros doscientos durmientes se destinarán a usos paisajísticos y como escalones del anfiteatro.
La producción se completa con postes olímpicos para uso municipal y se destinarán a un programa de colaboración con las empresas a radicarse en el área industrial. "Los empresarios pondrán el material y nosotros la tecnología y la infraestructura, y nos quedamos con un quince por ciento de la producción", comentó el funcionario.
La Ciudad
