El salón Naranja de la Sociedad Rural se va perfilando como el sitio favorito para la instalación del casino -cuya licitación viene demorada-, o bien para ser sede del centro de convenciones que el grupo operador deberá también emplazar.
Los movimientos de entidades empresarias, gremiales, políticas y también del Ejecutivo municipal parecen tomar energía sobre el comienzo de febrero, con la voluntad de que a fin de año puedan verse realidades. No están seguros de que el ímpetu sea el mismo en las autoridades de la Caja de Asistencia Social de Santa Fe que debe redactar la licitación; notan que el proceso no avanza y un evidente retraso en la confección de los pliegos. Para fin de año, todo parece indicar, ya estará funcionando a contados kilómetros el casino de Victoria si es que el puente finalmente logra unir ambas ciudades.
El jueves pasado ingresó al Concejo el proyecto de ordenanza de los justicialistas Luisa Donni y Fernando Burgoa para que el predio ferial Parque Independencia (ex Sociedad Rural) sea la zona de radicación, porque tanto el terreno como las instalaciones resultan "optimas por ubicación, posibilidad de arribo de distintos lugares y la cercanía a la zona céntrica y a los hoteles". También destacan la belleza del ámbito, la calidad de las construcciones ("no obstante el abandono") y la incomparable amplitud.
José Luis Bocca, de la Cámara Hotelera Gastronómica, dijo que hoy por hoy el salón Naranja es el único lugar capaz de albergar 1.500 personas con comodidad y aire acondicionado para eventos de relieve. Y que al fracasar las dos últimas licitaciones lanzadas por la Municipalidad el complejo se encuentra desaprovechado desde hace más de dos años.
De todas maneras el directivo, que acompañó a los gremialistas de la CGT en una reciente conferencia de prensa, apoyó a estos en el pedido que el Hipódromo sea también un lugar atendible. Los sindicalistas pretenden que el gremio del Jockey Club -conducido por el histórico Herminio Pittia- recupere parte de los mil afiliados que vio caer en los últimos años por la debacle de la actividad hípica. Las fuerzas que no pusieron en estos años para reclamar por un mejor gerenciamiento del Hipódromo -responsable de la pérdida de los puestos- parecen dispuestos a gastarlas ahora para que la ruleta se instale en el circo del Independencia.
Pero entre un elenco de urbanistas y también de concejales la opción del Hipódromo nunca prendió por problemas de seguridad (mucha oscuridad de noche en las calles de ingreso) además de que una parte de las instalaciones y del predio (10 hectáreas) corresponden al Instituto Provincial de Educación Física (Isef) en una evidente contraposición de funciones (ver aparte).
El Departamento Ejecutivo presentará el viernes próximo el menú de posibilidades dentro de la zona que considera apropiado: bulevar 27 de Febrero desde el río hasta avenida Ovidio Lagos por ambas márgenes. Allí, se incluirán espacios públicos en manos del municipio o concesionados, pero también terrenos e inmuebles propiedad de particulares (galpones vacíos, por ejemplo).
Este último agregado, el de los inmuebles de particulares, que no habían sido contemplados hasta ahora, agrandará indudablemente la gama de posibilidades a la hora de la aprobación final, que estará en manos del Concejo y el Ejecutivo. La Intendencia, entonces, luego de la presentación del viernes a través de su oficina del Plan Estratégico, enviará el mensaje al Concejo con la intención de que resulte un consenso.
El concejal Oscar Urruty, integrante de la comisión de Planeamiento que deberá aprobar el mensaje del Ejecutivo, señaló: "No vamos a alentar una sola localización, sino varias, como la zona del Puerto Norte (donde estaban las terminales portuarias), el Parque Scalabrini Ortiz, el Salón Naranja, si es que la infraestructura se adapta a los requerimientos, y también el parque Hipólito Yrigoyen (cercano a la estación ferroviaria de 27 de Febrero y Alem)".
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La Ciudad
