Pentagonal

Boca, el más grande del verano

El equipo de Bianchi, que ya era campeón antes de jugar, se despidió con una victoria ante Racing

Sólo para cumplir. Con esa premisa salieron a jugar Boca y Racing la última fecha del pentagonal de verano, ya que el equipo de Carlos Bianchi se había coronado campeón anteanoche tras el empate entre independiente y River. Pero debido a la proximidad del Clausura la excusa sonaba más que interesante para que tanto el Virrey como Osvaldo Ardiles pudieran relojear a sus muchachos durante otros 90 minutos. A juzgar por el 3 a 2 final a favor de los xeneizes será el Pitón el que deba intensificar los trabajos de cara al torneo que se avecina.
Racing fue el que avisó primero con una escapada de Estévez por derecha y que segundos más tarde Arano no pudo definir de cabeza. Tal vez por esa predisposición fue precisamente el equipo de Ardiles el que logró ponerse en ventaja. El colombiano Bedoya habilitó a Rueda para que el ex Talleres definiera con inteligencia ante la salida de Abbondanzieri.
Ese gol dibujó una sonrisa en el público racinguista, más teniendo en cuenta la floja performance de su equipo a lo largo del torneo, pero Boca se encargó rápidamente de cambiar el rumbo del partido.
Ezequiel González tuvo la libertad necesaria en el borde del área académica para asistir al Mellizo Guillermo y tras su disparo que rebotó en Cuenca apareció Calvo en soledad para estampar el 1 a 1. Pero la cosa no quedó ahí. Otra vez la fórmula González-Guillermo, esta vez por izquierda, volvió a dar sus frutos. El ex Gimnasia envió el centro pasado para que el Chelo Delgado se encargara de hacer que la alegría se trasladara de tribuna.
Con ese resultado estaba claro que el mayor desgaste iba a recaer en Racing y que Boca apostaría a tener la pelota y aprovechar algún descuido de la última línea académica, como el que llegó a los 13' luego de que Ubeda y Cuenca tardaran una eternidad en achicarle los espacios al Chelo.
Pero ese no fue el único regalito de la noche, ya que del otro lado Abbondanzieri aportó lo suyo. El Pato perdió infantilmente la pelota afuera del área y Rueda hizo gala de su instinto goleador y puso a su equipo a tiro del empate, el que pudo llegar en el último minuto cuando el goleador racinguista dilapidó una chance inmejorable.
Con esa jugada se cerró prácticamente el partido. Así Racing se fue con la cabeza gacha, sabiendo que aún tiene muchas cosas por corregir antes del inicio del torneo Clausura, mientras que Boca se dio el gusto, además de ser campeón, de despedirse del torneo de verano con un triunfo.

Delgado marcó dos veces para el campeón del verano.