"Tenemos que seguir insistiendo. Tenemos que marchar una y otra vez para que los criminales vayan presos. Somos los que podemos lograr que se haga justicia". Las palabras del padre Joaquín Núñez condensaron ayer un nuevo reclamo por la investigación de la trágica represión de los saqueos, en un acto que se realizó en la zona oeste a once meses de los hechos y que contó con la presencia de familiares de varias de las víctimas.
El acto se inició a las 18, en la esquina de Pasco y Pascual Rosas, a metros de donde una bala policial mató a Yanina García, una vecina de 18 años. Sin poder contener las lágrimas, Lili Mansilla, la madre de la joven, pidió que a las personas que puedan tener datos sobre lo que ocurrió en el barrio "que se animen a hablar" y destacó que Yanina "no hizo nada, era una chica que no había empezado a vivir".
Luego una amiga de Yanina leyó una carta y hablaron familiares de Claudio Lepratti y Walter Campos. Catalina Delgado, la hermana de Juan Delgado, denunció que recibió llamadas telefónicas intimidatorias en su casa y que su hijo de 16 años fue detenido sin causa por la policía y que no se le dio aviso, pese a tratarse de un menor.
Posteriormente, unas cien personas, en su mayoría niños y jóvenes, marcharon por el barrio. La columna se detuvo frente al edificio del supermercado que fue saqueado en las jornadas de diciembre y en cuyas paredes se leen ahora inscripciones en memoria de Yanina García.
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La Ciudad
