Año CXXXV
 Nº 49.660
Rosario,
martes  12 de
noviembre de 2002
Min 15º
Máx 24º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





Opinion
Reflexiones sobre la relación entre la prensa y la Justicia

Claudio Puccinelli (*)

La compleja realidad posmoderna conlleva una prensa y medios de comunicación poderosos económicamente, con gran influencia en los órganos de poder. Los jueces, por su parte, luchan contra el descrédito, unos pocos se aferran en pos de la conservación de su statu quo, y los demás lidian contra la presión de la noticia diaria que los persigue ante una falta de resolución conforme a los criterios que los medios han instalado en la sociedad, y, por ende, pretenden lograr.
El poder de la prensa no se ejerce exclusivamente contra el Poder Ejecutivo y el Legislativo, sino también sobre el Judicial. Encuestas y entrevistas que realicé como trabajo de campo demuestran que cuando un medio publica una información relacionada con un proceso judicial, todos los sujetos que intervienen en él se ven condicionados en su actuación.
Los abogados, los fiscales y los jueces tienen cuidados especiales en esos casos. Específicamente respecto del juez, ¿cómo se debe interpretar dentro del contexto desarrollado? Se afirma que pierden independencia e imparcialidad, porque de lo contrario la respuesta generalizada debió haber sido que nunca toman cuidados especiales cuando una causa tiene trascendencia en los medios, al igual que eventualmente podrían haber contestado ante la pregunta si tendrían algún cuidado especial si el reo es representado por un abogado hombre o mujer. Pero no es así: la publicidad los afecta, y mucho.
Es más, los mismos periodistas han sido tajantes en cuanto a que las causas que toman estado público se tramitan con mayor celeridad.

Jueces atentos a la prensa
Si se profundiza la información colectada, se advierte que -con mayor o menor intensidad- un 83,30 por ciento de los encuestados afirma que existe una dedicación judicial diferenciada en casos que trascienden a través de la prensa. Es más, ningún periodista contestó que nunca se le da una mayor dedicación.
Por lo tanto, desde el aspecto sociológico, es evidente la influencia que los medios de comunicación ejercen sobre los procesos. Y desde el ámbito científico, se vislumbran los efectos de la justicia mediática sobre la esencia del proceso, entendido como una garantía para el ciudadano. Si el juez no es independiente, o mejor dicho, si sólo es probable que el juez no sea independiente, no debe juzgar, porque basta esa probabilidad para que no se deba poner en peligro la garantía que constituye el proceso.
En tal sentido se deben tomar medidas para subsanarlo (lo cual excede este marco) porque, reitero, de lo contrario se afecta la garantía establecida a favor del ciudadano respecto de que para destruir el estado de inocencia debe haber una condena (civil o penal), que sea el resultado de un proceso previo. Y para que éste exista, el juez debe ser imparcial e independiente. Dicho de otro modo, si el juez no es imparcial o independiente no hay proceso.
(*) Abogado


Diario La Capital todos los derechos reservados