Entidades cañadenses contra la ampliación de una cerealera

Vecinos, una escuela, un club y hasta el hospital se oponen al funcionamiento de una acopiadora de granos

Cañada de Gómez. - Instituciones, reparticiones públicas, un establecimiento escolar y un club expresaron su oposición a que la planta de silos de la empresa Cereales Santa Lucía pueda ampliar sus instalaciones. La opinión fue esgrimida por las entidades en una reunión convocada por concejales.
Los ediles convocaron a representantes del hospital San José, el Jardín de Infantes Nº 178, el hogar de ancianos Luisa Dodero de Migoni, el Club Arroyito y el Area de Salud para consultarlos sobre un proyecto del Ejecutivo por el cual se pide autorización para una ampliación en la cerealera. La iniciativa del intendente Amílcar Abate pretende otorgar un permiso de construcción de algunas obras y mejoras de las instalaciones como silos portátiles, depósitos y trabajos menores en la empresa instalada sobre calle Colombia. Los ediles pidieron el pase a comisión y reuniones para conocer la opinión de los vecinos.
Fronteros del barrio Libertad iniciaron la semana pasada una protesta frente al municipio para impedir el proyecto. En las paredes exteriores de la Municipalidad colocaron carteles de protesta contra Abate, quien había solicitado autorización para firmar un convenio con Santa Lucía para permitir una ampliación de hasta el 15 por ciento de la capacidad instalada.
"Nunca estuvimos de acuerdo con la ubicación de la cerealera y menos ahora con el pedido de ampliación. Los cañadenses debemos comenzar a trabajar sobre un proyecto de la ciudad futura y reglas claras para el uso del suelo en lo que se refiere asentamientos industriales", dijo el director del hospital San José, Ricardo Tonella.
La presentación de Abate tuvo un rápido tratamiento en el Concejo Municipal. El edil opositor Humberto Acánfora dijo que necesitaba los planos y el cronograma para hacerse de una idea de los trabajos a autorizar. La opinión fue compartida por su par Abel Romegialli.
La reunión de los ediles con los representantes de las entidades duró casi tres horas. A su fin, la posición de los dirigentes fue unánime: no permitir que se siga ampliando la empresa en detrimento de la calidad de vida de los vecinos de ese sector. "Hay que trabajar para que Cañada de Gómez deje de tener ciudadanos de primera y de segunda", añadió Tonella. Por su parte, el jefe de el área de Salud VI, Oscar Molón, consignó que quienes forman parte de esa repartición "siempre mantuvimos la misma posición".

La cerealera nunca fue bien recibida por los vecinos.