Boca Juniors se complicó ayer, pero sacó el partido adelante, le ganó a Huracán 3-1 en la Bombonera y retomó la persecución de Independiente en la lucha por el título en el Apertura. El equipo de Oscar Tabárez se puso a seis puntos del líder a cuatro fechas del desenlace, pero lo suyo quedó muy supeditado a lo que pase con Independiente, que será su anfitrión en la penúltima fecha. Boca todavía está bastante lejos de su objetivo, pero tiene más chance que hace una semana gracias a que Chicago hizo tropezar al puntero. Lo concreto es que Boca venció con justicia a Huracán por dos goles de diferencia en un encuentro en el que tuvo muchos altibajos, pero en el que creó una buena cantidad de situaciones como para convertir y en el que de nuevo Delgado fue jugador clave. Además del Chelo Delgado, los tantos del local los lograron Rolando Schiavi y Guillermo Barros Schelotto. Kobistyj había obtenido el empate provisorio. Huracán salió con la idea de presionar muy arriba y tuvo más la pelota que Boca en los primeros diez minutos. Recién después de ese lapso Boca logró afirmarse en la mitad de la cancha, tener más la pelota y ser más agresivo, en especial cuando fue por los laterales, con Ibarra, Guillermo y Rodríguez. El todavía aspirante al título tuvo chances claras como para doblegar a un oponente que pelea por mantenerse en la categoría. Boca llegó al primer gol en una maniobra interesante y en un momento en el que el juego era monótono. Fue un saque rápido de Abbondanzieri, Tevez la bajó y jugó para el pique de Delgado y el Chelo se le escapó a Kobistyj, eludió a Schulmeister y definió. Prácticamente en el comienzo del segundo período Huracán consiguió la igualdad por un córner que ejecutó Zermatten y cabeceó casi agachándose Kobistyj. Boca intentó ser agresivo, pero estuvo muy acelerado, mientras Huracán se preparó para demorar y aferrarse al 1-1. El desnivel fue producto de la insistencia y por haber metido a Huracán en su área. Matías Donnet cruzó una pelota hacia la derecha, Delgado picó y la tomó a espalda de los defensores y cuando le salió el guardavalla tocó hacia atrás para facilitar la definición de Schiavi. Casi en forma inmediata Delgado promovió el pique de Bracamonte por la derecha, el artillero cruzó el balón y el Mellizo se ocupó de empujarlo hacia la victoria segura. La parcialidad boquense terminó entusiasmándose con la nueva oportunidad que surgió a partir del tropezón rojo. (DyN)
| |