Hace seis fechas que ninguno de los dos equipos que tiene Rosario jugando en la primera división del fútbol argentino logra los tres puntos. El último triunfo de un equipo de la ciudad fue el 08/09/02, cuando Newell's venció a Nueva Chicago en Mataderos por 2 a 1, con goles de Sebastián Domínguez y Guillermo Marino, por la 7ª del torneo Apertura. Desde allí, jugó seis partidos, de los cuales empató tres y perdió los tres restantes.
En tanto, Central acumula 7 partidos sin triunfos con cuatro empates y tres derrotas desde aquel 1º de setiembre cuando cortó la racha de 8.143 días sin ganar en tierra leprosa, al vencer a Newell's por 2 a 0 con goles de Luciano Figueroa y Gustavo Arriola.
Buceando en la historia, hay que remontarse 27 años, hasta el Metropolitano de 1975, para encontrar un antecedente similar. En aquel torneo los equipos rosarinos estuvieron siete fechas consecutivas sin obtener un triunfo entre la vigésima y la vigésima sexta fecha. La racha la cortó Central en la fecha 27 cuando venció a All Boys en condición de visitante por 3 a 2, con goles de Ramón Bóveda, el Negro González y Roberto Cabral.
El récord en esta materia data desde el campeonato de 1964, cuando canallas y leprosos se mantuvieron durante 8 fechas seguidas sin conocer el sabor de la victoria. Esta racha se dio entre las fechas número 14 y 21 del torneo de 1964, serie que se cortó el 11/10/64 en la fecha número 22, cuando en Rosario los canallas vencieron a San Lorenzo por 3 a 1, con tantos de Néstor Borgogno, el peruano Miguel Loayza y el Petiso Ricardo Fortunato Giménez.
Números fríos aparte, las estadísticas indican por el lado de los rojinegros que esta racha terminó con el ciclo de Julio Zamora, quien había tenido un buen arranque de campeonato. En tanto, por Arroyito los rumores no dejaron de escucharse en la semana respecto de la continuidad de César Luis Menotti al frente del plantel. Vale recordar que el Flaco había logrado la nada despreciable suma de 15 puntos sobre 18 en las seis primeras jornadas del torneo, pero después del gran triunfo logrado en el clásico (2 a 0 en el Parque para cortar un período de 22 años sin victorias en ese escenario) no logró ningún triunfo.
Para los equipos de la ciudad es tiempo de espantar a las brujas. Un triunfo ante Independiente revitalizaría al equipo canalla y una victoria leprosa sobre Olimpo le daría un gran envión al ciclo de Veira. Está claro que es necesaria una gran dosis de oxígeno y motivación para dos equipos que, por ahora, parecen no encontrar el rumbo de las primeras fechas.
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La Ciudad
