Gustavo Conti / La Capital
Zamora aseveró luego de la derrota ante San Lorenzo que una de las causas del mal momento que atraviesa su equipo se debe a que varios jugadores no digirieron aún la derrota en el clásico y por eso su rendimiento bajó. A juzgar por los resultados, no hay dudas de que la producción conjunta de Newell's mermó considerablemente tras el partido con Central y si se tienen en cuenta los puntajes individuales de Ovacion en todos los partidos, el técnico tiene razón. Excepto Guillermo Marino, Leandro Fernández, Sebastián Domínguez, Federico Lagorio y Lisandro Sacripanti, a todos se les achicó el promedio, aunque ninguno de ellos fue inamovible en el equipo.
Marino tuvo 5,67 de promedio con 3 encuentros en la primera mitad, hasta Independiente incluido, y 5,75 después en 4 partidos. Pero sólo fue titular en 3 partidos, mientras que en otros 2 entró al final y no tuvo puntaje.
Fernández jugó 2 encuentros hasta el clásico y su promedio fue de 5 puntos, mientras que luego del encuentro ante Central el defensor elevó su media a 5,50 en 4 partidos, por lo que en realidad es el que más se salva de la condena del técnico. Además, este caso es más representativo porque fue titular en todas esas presentaciones, mientras que en los otros 5 encuentros directamente no entró.
El caso de Sacripanti es especial, porque si bien elevó su promedio en 3 centésimas (casi nada), en realidad no es bueno. Tuvo 4,80 en los primeros 5 partidos y 4,83 en los últimos 6. El casildense jugó todos los encuentros y en 8 fue titular.
Mientras, Domínguez cosechó 5 puntos en su única actuación en la primera mitad (ante River) y el mismo puntaje en la media de los 5 partidos que disputó después de Central, es decir, fue parejo con un rendimiento discreto. En tanto, lo de Lagorio es poco representativo ya que jugó muy poco.
Los demás, todos bajaron su media. El que igual se mantuvo como el mejor de Ñuls fue Fernando Crosa, ya que si bien en la segunda parte lo superó Marino, jugó más que el volante, no salió nunca, y bajó del primer puesto en la primera mitad al segundo.
Si se tienen en cuenta los habituales titulares, Domizi fue el que más se cayó, ya que de 6,25 puntos de promedio bajó al de 4,83. Ahí nomás, el arquero Passet también fue uno de los que decayó bastante, ya que de 6,40 bajó a 5,25. El dato no es menor, ya que se trata de los jugadores más veteranos del plantel y los que deben impulsar al resto para salir de este mal momento.
Otro dato importante es que Zamora usó 16 jugadores hasta Independiente y luego 21, lo que habla también de que buscó más variantes. También hay que mencionar a los que desaparecieron después de Central, como Liendo y Vella, quienes tras ese partido nunca más fueron titulares.
Los números son demasiado fríos y no dicen toda la verdad. Apuntalan los dichos de Zamora pero está claro que no están todos en la misma bolsa.
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La Ciudad
