El viaje de regreso a Santiago del Estero les deparó una ingrata sorpresa a tres camioneros que días atrás habían comprado en Mar del Plata un Mercedes Benz 1114 con acoplado. Mientras atravesaban la provincia de Santa Fe al bordo del flamante vehículo, una banda de piratas del asfalto los interceptó en cercanías de Cañada Rosquín y, encañonados, dos de los choferes fueron subidos a un auto. Varias horas después dos de ellos fueron abandonados sanos y salvos en la zona rural de Bernardo de Irigoyen. En tanto la otra víctima apareció liberada en Zárate, en el norte de Buenos Aires. Según fuentes policiales, el rodado vacío y valuado en unos 35 mil pesos, hasta ayer no había aparecido.
Leandro Cossos, de 19 años, y Walter Ignacio Orellana, de 56, son mecánicos y transportistas en la ciudad de Santiago del Estero; el tercero es el rosarino Alejandro Antonio Bolognese, de 28 años. Orellana y Cossos habían viajado a Mar del Plata para adquirir un camión Mercedes Benz 1114 modelo 85 por un valor cercano a los 35 mil pesos y al momento de emprender el viaje de regreso al norte se les unió Bolognese, quien supuestamente tenía que conducir el rodado. El atraco fue denunciado por los santiagueños ante la policía de la localidad santafesina de Bernardo de Irigoyen, destacamento al cual llegaron luego de caminar varias horas por el campo.
Un viaje complicado
El viaje se había iniciado normalmente y todo estuvo tranquilo hasta una primera parada en Rosario. Allí, según declararon Cossos y Orellana, estuvieron cuatro horas para cargar combustible. El motivo de tal demora estuvo dado en que Bolognese "había aprovechado para pasar por su casa a saludar a su familia y demoró esas horas en regresar al camión", relató una fuente policial. Luego, los tres retomaron viaje hacia Santiago por la ruta nacional 34. Al llegar a inmediaciones de Cañada Rosquín, el camión fue interceptado por un auto Subaru con cuatro o cinco personas.
Los ocupantes del coche estaban con sus rostros descubiertos. Bajo amenazas de muerte con armas de grueso calibre hicieron detener el camión sobre la banquina. Eran aproximadamente las 13.30. Cossos y Orellana fueron subidos en la parte trasera del auto, en tanto que Bolognese quedó en poder de los maleantes. Los santiagueños fueron paseados por distintos lugares y varias horas después fueron liberados ilesos en un camino rural cercano a Bernardo de Irigoyen, a 60 kilómetros suroeste de Coronda.
Un hombre bajo sospecha
Ambos caminaron hasta ese pueblo donde contaron lo que había sucedido. Las actuaciones luego fueron derivadas a Cañada Rosquín, lugar donde se produjo el atraco para que sea la policía de ese lugar la que lleve la investigación. Cuando ya había caído la noche del domingo, la Unidad Regional del departamento San Jerónimo tomó conocimiento de que Bolognese había aparecido en la ciudad bonaerense de Zárate. Según le contó a la policía, los delincuentes lo habían llevado hasta allí para liberarlo sano y salvo.
En principio los pesquisas no tienen elementos para sospechar del rosarino y sólo fue citado a declarar en carácter de testigo. Aunque les llamó la atención que haya quedado él solo en poder de la banda y que lo hayan soltado en una zona "caliente" como el norte bonaerense. "Creemos que el camión fue a parar a esa zona", agregó una fuente.
La Ciudad
