Ben Hur de Rafaela, el recientemente ascendido al círculo privilegiado del básquetbol argentino, se dio el gusto grande de vencer al último campeón Atenas de Córdoba por 95 a 82, en el partido inaugural de la Liga Nacional.
El partido fue parejo hasta la finalización de la primera parte, período tras el cual los dirigidos por Guillermo Narvarte llevaban ventaja mínima (47-46). Posteriormente, el quinteto santafesino imprimió una ofensiva a fondo y desnudó las deficiencias físicas de Atenas.
Ben Hur, apoyado fervorosamente por 3.500 espectadores que colmaron las instalaciones del gimnasio, mostró un planteo inteligente y amaneció ganando bajo los tableros, gracias a la muy buena performance de Walter Storani.
Durante el primer tiempo, los rafaelinos tuvieron la iniciativa, pero no pudieron despegarse en el tanteador, a causa de que Diego Lo Grippo tomó bien la marca de un Storani que no fue tan profundo en esos 20 minutos iniciales.
Sin embargo, al no aparecer el ex Gimnasia y Esgrima La Plata, el quinteto local sacó diferencia con el muy buen momento de Alejandro Coronel y Edgardo Agudo.
Y el norteamericano McCray aportó lo suyo para que el elenco local dominara el desarrollo.
Pero, el hombre a hombre en la marca, la irrupción de Campana y algunas apariciones de Matías Lezcano les otorgaron a los cordobeses la última posibilidad de pelear palmo a palmo el partido, a punto tal que apenas iniciado el tercer segmento pasó al frente por una unidad (52-51).
No obstante, el esfuerzo salió caro. Porque Atenas se derrumbó físicamente, no pudo detener el goleo de Storani y en apenas minutos el elenco local se distanció (65-56).
A partir de allí, el quinteto santafesino reguló el ritmo y jugó con la desesperación de un campeón que descontó en el último tramo, pero que nunca mostró la convicción suficiente como para erigirse en el ganador del partido.
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La Ciudad
