Los profesionales de la salud provincial se sienten "parias"

Médicos y maestros critican las disparidades en los sueldos

El ministro Bondesío dijo que las diferencias salariales podrían modificarse sólo con una reforma constitucional

Carina Bazzoni - Gabriela Zinna / La Capital

Las diferencias salariales que existen entre los 96.048 empleados estatales de Santa Fe son "una injusticia". Esa es la idea unánime que sostuvieron los representantes gremiales de los docentes y médicos. Si bien las disparidades se explican porque existen distintos convenios colectivos de trabajo, resulta difícil comprender que un empleado legislativo gane varias veces más que un docente, un director de hospital o un policía. Pero los argumentos no alcanzan para amortiguar las críticas lanzadas desde los distintos sectores. Sin ir mas lejos, el secretario adjunto del Sindicato Médico, Eduardo Taboada, dijo que los profesionales de la salud en el Estado provincial son "parias" y calificó de "escalofriantes" las diferencias en los haberes de los distintos agentes estatales. La delegada de Rosario de la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé), Stela Michalek, dijo que es "tremendo" que los sueldos de los médicos y los maestros provinciales estén devaluados en comparación con otros agentes públicos.
Las abismales diferencias salariales que existen dentro de la administración pública provincial y entre los agentes de los distintos poderes del Estado, que fueron publicadas en la edición de anteayer de La Capital, generaron una catarata de repercusiones y críticas.
Desde el Sindicato Médico, Taboada reconoció que los sueldos bajos dentro de la salud pública provincial son un problema de vieja data. Es más, comentó que hoy el básico de un médico está fijado en 90 pesos y necesita de los adicionales para llegar a alcanzar un salario de tres cifras.
Con todo, y teniendo en cuenta que un director de hospital cobra menos que un empleado de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), Taboada dijo que los médicos son "parias" dentro de la administración pública y explicó que esta "vergonzosa situación" se sostiene porque "no hay interés en la salud".
La representante local de Amsafé no vio con malos ojos que haya salarios altos dentro de la estructura provincial. Pero puso sus reparos. "El mensaje que se está dando a la sociedad es que el trabajo de los docentes y de los empleados de la salud vale poco" y por eso tienen sueldos bajos. A renglón seguido opinó que es peligroso que la sociedad se acostumbre a creer que un maestro "puede vivir y trabajar estando por debajo de la línea de la pobreza" y llamó a salir de la crisis "a través de una distribución más equitativa de la riqueza".
Una fuente cercana al Senado equiparó las diferencias salariales dentro de la órbita del Estado con las jubilaciones de privilegio y consideró que ambas son "tremendamente injustas". Pero argumentó que esos desfasajes existen porque cada gremio estableció un convenio diferente. La fuente consideró que hay que escuchar los reclamos de los empleados de las áreas sanitaria y educativa pero aclaró que desde la Legislatura no se pueden prometer cambios que comprometan las arcas oficiales.
"Cuando era ministro de Educación me dolía que en la administración pública algunos tuvieran plus y otros no", confesó el ahora titular de la cartera sanitaria Fernando Bondesío. El ex gerente de la Caja de Jubilaciones de la provincia dijo que estas inequidades sólo pueden corregirse mediante una reforma de la Constitución, para evitar que lleguen cataratas de juicios contra el Estado por los derechos adquiridos de los agentes a los que se les podría pretender recortar sus abultados haberes.
El subinterventor de la EPE, Sebastián Chiola, advirtió que las diferencias en los sueldos son producto de los distintos convenios colectivos de trabajo y recalcó que se está intentando reducir el costo salarial. El funcionario agregó que año a año "se viene recortando el monto de las partidas para haberes", pero advirtió que la intención "no es achicar el sueldo de bolsillo sino los aportes sindicales".

Los magros salarios de los médicos se suman a la crisis. (Foto: Daniel Carrizo)