"No hay pruebas directas. Si los testigos no reconocen a los detenidos, el juez va a tener que liberarlos". El anticipo, realizado hace tres semanas por una fuente vinculada a la investigación del robo de 400.000 pesos a un camión de la empresa Prosegur, se cumplió inexorablemente el miércoles. Ese día, por la tarde, el juez Jorge Eldo Juárez firmó las órdenes de excarcelación de seis de los siete detenidos sospechados de participar del atraco, y al séptimo lo dejó en prisión por otra causa: tenía una orden de captura por su presunta participación en otro delito. A todos los dejó libres por el mismo motivo: en el expediente no hay ni una sola prueba concreta sobre su vinculación con el asalto.
El robo ocurrió a las 7.15 del 15 de agosto, cuando varios delincuentes sorprendieron a los custodios que transportaban el dinero mientras se disponían a traspasarlo del camión al Banco Bersa de Corrientes al 300. En pocos minutos los asaltantes se apoderaron del dinero y huyeron sin dejar rastros, aunque antes de hacerlo golpearon y lastimaron a uno de los guardias.
Al día siguiente la Brigada de Investigaciones de la policía local comenzó a detener en San Nicolás a varios sujetos a los que sindicó como los autores del atraco. Todos ellos tenían algo en común: no sólo tenían antecedentes policiales sino que algunos eran señalados como expertos en este tipo de atracos. Los días siguientes, los operativos continuaron en Capitán Bermúdez y en total hubo 8 detenidos supuestamente vinculados al atraco.
Pero en el juzgado de Juárez nunca parecieron estar muy convencidos sobre los indicios con los que contaban. Por eso, a los cinco días de las detenciones, la fuente citada más arriba se animó a pronosticar que todos quedarían libres. Y el anticipo se cumplió ayer inexorablemente. "Están libres porque en el expediente no había ni un solo elemento que los dejara pegados", confió ayer otra fuente.
El único que quedó detenido es José Marcatelli, y no por su presunta participación en el atraco sino porque se encuentra procesado por evasión de la alcaidía de la Unidad Regional X, con asiento en Cañada de Gómez, y acusado por un robo en esa ciudad.
Con todo, en la Brigada de Investigaciones se muestran convencidos de que al menos algunos de los sujetos liberados por Juárez tuvo algo que ver con el robo. Ahora la tarea consiste en encontrar indicios para probarlo ya que al menos por un tiempo los excarcelados continuarán vinculados a la causa porque no fueron sobreseídos definitivamente sino beneficiados con un falta de mérito. Otra tarea es encontrar a un prófugo, cuya identidad se mantiene en reserva, que podría resultar clave para dilucidar definitivamente si éstas personas tuvieron algo que ver con el asalto.
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La investigación por el robo al blindado vuelve a cero. (Foto: Angel Amaya) |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
