Año CXXXV
 Nº 49.555
Rosario,
martes  30 de
julio de 2002
Min 4º
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Hijo'e tigre
Rugby: Manuel Fernández, el indiecito

Pablo F. Mihal / Ovación

Manuel Fernández se define como un jugador con muchas ganas de ganar, al que le encanta tacklear y estar con los forwards en la cocina. Esta descripción no es casual, es más, podría decirse que es una marca registrada heredada de su padre, el Indio Fernández, de ahí que también lo reconozcan como el Indiecito.
Muchas veces se trata, en vano, de comparar al padre con el hijo, pero para Manuel las cosas están bien claras: "Seguir los pasos de mi viejo en el club para mí es muy importante, una cosa muy linda, pero vamos a ver si llego a ser lo que fue él", dice reconociendo de esa manera la carrera deportiva de su padre.
Tiene la camiseta de Duendes tatuada en la piel y juega desde los 9 años. Tuvo su bautismo de fuego en la primera división en el 2001 cuando el conjunto verdinegro enfrentó a Regatas de Bella Vista por el Nacional de Clubes.
Este año, ante las ausencias de los hooker Carlos Promanzio y César Selva tuvo que calzarse la camiseta número 2 y lo que al principio del año asomó como una promesa es hoy una realidad. Gracias a la continuidad que tuvo, su juego mejoró desde entonces. Fecha a fecha fue creciendo y aunque todavía no llegó a su techo se convirtió en un jugador importante en el esquema de Duendes. Este es su primer año en la primera división y ya se dio el gusto de gritar campeón.
-¿Cómo viviste este torneo?
-Reemplazar a Carlitos (Promanzio) no es fácil, es más, creo que todavía no llegué a hacerlo. Su ausencia y la de varios más se notó en el scrum, que fue donde tuvimos los problemas más grandes. No obstante, practicamos mucho y fuimos mejorándolo partido a partido.
-¿Vos te imaginaste al principio de la temporada que se iba a dar el campeonato y de la forma en que se dio?
-No, para nada. Creo que ganar el torneo en forma anticipada no pasó por la cabeza de nadie, sobre todo porque nos faltaban varios jugadores importantes.
-¿Qué apreciación hacés del campeonato?
-Fue un torneo donde a la fase campeonato clasificaron equipos muy difíciles. Los santafesinos fueron equipos muy duros y no hubo ni un partido en donde pudiéramos decir que lo ganábamos fácil. Para nada. Todos los partidos fueron muy difíciles pero hicimos lo mejor que pudimos en cada uno de ellos, sacamos los bonus y así pudimos salir campeón una fecha antes.
-¿Te sentís titular en la primera?
-(piensa)...Estoy jugando de titular y voy a seguir peleando el puesto, pero no me siento un titular indiscutido. Me falta mucho para eso.
-¿Cuáles son tus objetivos?
-Obviamente que dentro de mis metas está el hecho de seguir jugando en la primera de Duendes, y después tratar de seguir sumando amigos como lo hice este año.
-El fin de semana se viene otro clásico con Jockey. ¿En que cambia jugar ese partido ya con el título asegurado?
-Por más que hayamos conseguido el campeonato, jugar con Jockey para nosotros siempre es jugar una final. Es un partido importantísimo, por eso vamos a salir a ganarlo, a tratar de mantener el invicto de esta rueda. Creo que Jockey, al igual que nosotros, va a salir a dejar todo. Va a ser un Duendes-Jockey como siempre.


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