Año CXXXV
 Nº 49.535
Rosario,
miércoles  10 de
julio de 2002
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En septiembre, unas jornadas docentes analizarán la obra de la educadora
Cartas de los chicos a Leticia Cossettini
No pasan los doce años pero todos muestran su admiración y reconocimiento por la maestra de barrio Alberdi

Marcela Isaías / La Capital

Todo comenzó con el último cumpleaños de Leticia Cossettini, el 19 de mayo pasado, cuando cumplió 98 años. Un grupo de docentes de la Escuela Nº 55 Domingo Faustino Sarmiento y otro de la Técnica Nº 465 de Rosario decidieron tentar a los alumnos a conocer quién es Leticia Cossettini y quién fue su hermana Olga. La iniciativa tuvo éxito. Los chicos no tardaron en mostrar su admiración por quienes consideraron educadoras "para sentirse orgullosos". Pasaron de conocer el trabajo que realizaron entre 1935 y 1950 en la escuela Carrasco de Rosario, a escribirle cartas a Leticia.
Enterados de que a esta maestra le gusta tomar el té en su jardín y leer todo lo que le escriben, sin pensarlo dos veces, se juntaron y en pocos días le hicieron llegar más de 40 sobres, cada uno con líneas diferentes, pero todos con las mismas ganas de agradecerle haberla conocido.
"Es que Leticia no daba clases como cualquier maestra, enseñaba con la naturaleza, explicaba cómo crecía una planta llevando a los chicos a verla crecer, no mostrándosela desde una lámina", dice Franco, alumno de 7º año de la EGB de la escuela Sarmiento. Al recuerdo de Franco se agregan el de sus compañeros de aula, Lucas y Jeremías, a quienes les fascinó el Coro de Pájaros formado por Leticia. "Escuchando a los pájaros, les propuso a sus alumnos que formaran un coro imitando sus sonidos", explican los chicos.
Federico, también de séptimo, se mostró orgulloso de contar que Leticia había visitado su escuela en 1994, y había plantado junto al palo borracho que está en el patio, unas petunias de su jardín. A Agustín y Nahuel, de 6º año de la misma escuela, la admiración pasa por saberla una maestra santafesina. En cambio, para Victoria, también de sexto, lo importante fue saber que más allá de que era reconocida internacionalmente "nunca se quiso ir del país".
Las más de 40 cartas llegaron a manos de Leticia. "Las recibió emocionada y prometió contestarlas a todas", dijo Graciela Amiel, la maestra de estos cursos que empujó a los chicos a valorar la obra de estas hermanas.

Recuperar la memoria
Para la directora de la Escuela Sarmiento, Norma Fontán, las cartas no son un hecho aislado, forman parte de un proyecto institucional que apunta a la enseñanza de los valores. "Recibimos esta propuesta de trabajar en común con la Escuela Técnica Nº465. Nos interesa revalorizar la obra de Leticia y Olga porque está vigente, sobre todo en un momento tan especial para nuestra sociedad", dijo Fontán.
La directora se mostró partidaria de recuperar la memoria, la identidad pedagógica que representan la experiencia de las hermanas Cossettini, e insistió con la actualidad de su pensamiento: "Leticia decía que la escuela es y sigue siendo el ámbito para luchar contra la deshumanización del sistema".
El profesor de la Técnica Nº465 y uno de los creadores del portal educativo Intercol (www.intercol.org.ar), Fernando Pisani, es el gestor de esta iniciativa. "La idea es contagiar a otras escuelas, para que apoyen esta propuesta y los chicos también le escriban a Leticia, además de conocer qué hicieron las hermanas Cossettini", dice Pisani.
Para facilitar el encuentro, creó un correo electrónico: [email protected], donde los chicos podrán enviar sus trabajos o cartas para alcanzarle luego a la maestra de Alberdi. "Queremos -expresó- simplemente que se produzca el contacto entre Leticia y las nuevas generaciones, y las no tan nuevas, ya que estamos necesitados de buenos ejemplos".



Los chicos escribieron las cartas a la maestra.
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