Año CXXXV
 Nº 49.535
Rosario,
miércoles  10 de
julio de 2002
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Rehabilitación en el agua
Los ejercicios en piletas alivian el dolor y aceleran los tratamientos
La hidroterapia es un recurso para deportistas lesionados o afecciones musculares, articulares y neurológicas

María Laura Favarel / La Capital

Cada vez más los terapistas recurren al agua para rehabilitar a personas con afecciones traumatológicas y neurológicas. El medio acuático acelera la rehabilitación, disminuye el dolor y facilita la movilidad del cuerpo lesionado, a la vez que genera un alivio físico y anímico. La hidroterapia (ejercicios en el agua) se presenta como un recurso eficaz para deportistas lesionados, o personas afectadas a nivel muscular, articular y neurológico.
Generalmente el término rehabilitación se asocia a movimientos dolorosos y traumáticos. Quienes comenzaron a trabajar en el agua coinciden en afirmar que no sólo sienten un alivio en el dolor de la parte afectada, sino que también logran relajarse y se animan al comprobar los rápidos avances. "Una persona que en la superficie no podía desplazarse por la afectación de alguna articulación o de los músculos, en el agua percibe que su discapacidad se desdibuja", comentó el kinesiólogo Pablo Millikonsky, que trabaja con pacientes en el sector de Hidroterapia del Centro de Ortopedia y Traumatología (COT). "Esto se debe al poder antigravitatorio del agua por el que las fuerzas no se focalizan en algún punto de la articulación, como sucede en el suelo", continuó.
El agua ejerce presión sobre el cuerpo y por los principios de flotabilidad, genera beneficios circulatorios. Sumado a ello, la temperatura del agua (30º) relaja los músculos, lo que genera un alivio importante del dolor y permite que los movimientos sean localizados e independientes de otras partes de cuerpo.
Estos beneficios animan a los kinesiólogos, sin embargo, el agua no es para todos. No se recomienda a pacientes con cardiopatías, aquellos que sufren presión alta o baja y para quienes padecen alguna infección. Por esto es necesaria una indicación del cardiólogo.

Aguas sanadoras
"Hay quienes luego de un largo período de inmovilización en el agua empiezan a realizar alguna actividad física. También, a los deportistas de alta competencia que sufren alguna lesión se los puede entrenar rápidamente", amplió el kinesiólogo. En el gimnasio sería muy difícil realizar estos movimientos, por el estrés que se genera en las articulaciones y los músculos.
En Rosario existen sitios como Ilar, que cuenta con piletas, como también, algunos profesionales concurren a los natatorios de los clubes para ejercitar a sus pacientes.
El Centro de Ortopedia y Traumatología posee una pileta con medidas y profundidades especiales, además de barandas para garantizar la profundidad y líneas dibujadas en el suelo para realizar los diferentes ejercicios.
En pacientes crónicos como los obesos, el agua también resulta beneficiosa. En este medio encuentran un lugar ideal donde realizar los ejercicios porque no sienten el peso del cuerpo. Ocurre lo propio con las personas que padecen enfermedades reumáticas, y que por las deformaciones en las articulaciones les resulta dificultosa la marcha. "Ellos necesitan hacer ejercicio porque la actividad produce líquido sinovial en la articulación y esto alivia el dolor. Estos ejercicios serían muy dolorosos fuera del agua", dijo.
El medio acuático también beneficia a las personas con afecciones neurológicas. "Quienes por su afección tienen una alteración del equilibrio y fuera del agua no se sostienen, en las piletas tienen menor riesgo de caídas y fracturas. Además se puede estimular el equilibrio y mejorar la marcha", afirmó Millikonsky. Y los pacientes con músculos retraídos trabajan con terapias de presión de agua y también se la utiliza en aquellos que deben recuperar la movilidad.
El beneficio de la hidroterapia no es exclusivamente físico, sino que también redunda en un bienestar psicológico y anímico. "La persona se siente bien al comprobar que puede realizar los ejercicios y al reconocer que pueden moverse. Esto les levanta el ánimo".
Los especialistas afirman que el tratamiento de rehabilitación se acelera si se efectúa en el agua. "Se logra una mayor aceptación del tratamiento, ante el cual los pacientes se muestran mejor predispuestos a la rehabilitación" concluyó el kinesiólogo.



Los trabajos acuáticos son personalizados.
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