Año CXXXV
 Nº 49.478
Rosario,
martes  14 de
mayo de 2002
Min 15º
Máx 20º
 
La Ciudad
La Región
Política
Economía
Opinión
El País
Sociedad
El Mundo
Policiales
Escenario
Ovación
Suplementos
Servicios
Archivo
La Empresa
Portada


Desarrollado por Soluciones Punto Com





cartas
Argentina, ¡te quiero!

Veo a esta Argentina de hoy debatiéndose por tantos fracasos, después de tantas promesas de nuestros gobernantes. Juraron sobre la Biblia, invocando a Dios y a la patria, defenderla del enemigo, y ellos mismos la destruyeron. Esta tierra abrió sus brazos enormes para cobijar al extranjero de todas partes del mundo, sin distinción de raza o credo. Yo misma, soy descendiente de españoles e italianos. Vinieron a esta tierra bendita, de tierra fértil, sembraron sus raíces (sus hijos). Vinieron muy jóvenes y se quedaron hasta morir. Recuerdo a mi abuelo italiano, al que le decía: ¿por qué no se va a Italia? "Porque soy argentino y estoy feliz de estar en esta tierra". Vino a los 20 años y falleció a los 89. ¡Qué ironía! Esta nación tuvo su primer nombre Argentus (quiere decir plata) y hoy no tenemos ni un peso para sobrevivir. La plata era trasladada en barcos a España por el río de la Plata. Les digo a los que saquearon el país creyendo que éramos indios, hoy no lo somos, devuelvan el dinero si se sienten argentinos. ¿Dónde estará la plata, en Marte u otro planeta? Hoy soy una madre madura con 3 hijos y ellos quieren dejar este país para buscar el porvenir afuera, esto es muy triste. Aunemos esfuerzos para levantar a este país que está muy enfermo. Ha de resucitar como el ave Fénix de las cenizas y volverá a ser único y maravilloso como antes. No sé si yo lo podré ver.
LC 5538782


Diario La Capital todos los derechos reservados