Los docentes provinciales nucleados en la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafé) resolvieron ayer dictar clases a partir del lunes próximo, fecha prevista por el Ministerio de Educación para el inicio del ciclo lectivo. Sin embargo, lo harán protestando, con distintas actividades que se prolongarán durante la semana. La decisión fue tomada en una jornada que quedará en la memoria de los santafesinos: una multitudinaria manifestación cerró la caravana por las cien localidades de la provincia que organizaron los maestros en contra del ajuste.
El lunes, todos a clase, aunque los docentes se darán su tiempo para hacer sonar campanas, a las 8 y a las 13 de ese día, realizar actos en las escuelas, movilizaciones y lectura de cartas abiertas a los padres.
La idea es mantener abiertas las escuelas para continuar el plan de lucha junto a la comunidad.
La gran marcha
Previo a la asamblea de Amsafé, y con una sensación térmica de 57 grados, la ciudad de Santa Fe fue escenario de la concentración con la que los docentes terminaron la marcha por las cien localidades de la provincia. Los maestros desembarcaron en la plaza de Mayo a fin de gritar frente a la Gobernación su oposición al ajuste educativo anunciado (estimado en unos 22 millones de pesos).
Miles de docentes de toda la provincia y todas las modalidades -el cálculo de asistentes variaba según las fuentes, e iba de los 3.500 a los 10 mil que sugerían los organizadores- respondieron a la convocatoria e hicieron sentir su enojo por el recorte presupuestario al gobernador Carlos Reutemann y al ministro de Educación, Alejandro Rébola.
"Queremos un maestro en el Ministerio que sepa nuestras necesidades y no un bioquímico que lo único que hace es ajustar. El ministro se tiene que ir porque el pueblo le dice que no", tronó José María Tessa, secretario general de Amsafé, desde un improvisado escenario.
El acto contó con la presencia de la titular de la Ctera, Marta Maffei, quien reclamó en su discurso "que se vayan los políticos que se tienen que ir", pero se mostró en desacuerdo con que se vayan todos porque "no todos han sido traidores", y exhortó a "limpiar y legitimar" la política. "La lucha principal hoy es adentro del aula, porque hay que generar desde allí las condiciones necesarias tanto sociales como políticas para que el pueblo pueda salir adelante", dijo, y lamentó que los diálogos con el gobierno no sean fecundos porque los ministros de Educación en la Argentina "son un cero a la izquierda y siempre deciden los ministros de Economía".
La Ciudad
