Francisco Pelló recorre 50 años a través de una muestra didáctica

La exposición, que reúne originales y fotografías de trabajos, fue inaugurada en el Bernardino Rivadavia

Francisco Pelló y Hernandis presenta en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia una muestra didáctica en la que recorre cincuenta años de trabajo. La exposición, que mañana volverá a habilitarse al público, está organizada por los directores de Cuadernos de Divulgación Análisis, Olga Nora Mansilla y Osvaldo Vergara Bertiche, y tiene el propósito de mostrar el manejo de disciplinas variadas y técnicas diversas por parte del artista.
Nacido en Carlet, provincia de Valencia (España) y radicado desde muy chico en Rosario, Pelló ha realizado desde miniaturas pictóricas hasta monumentos imponentes en toda una gama de actividades. Entre otras pueden observarse originales y fotografías de trabajos en artes gráficas y publicidad a través de libros, revistas y campañas nacionales de diversos productos; escenografías para teatros y diferentes eventos como festivales y carnavales; restauraciones de esculturas y óleos, así como de iglesias y mansiones (ornatos, temples y fachadas); retratos en diversas técnicas, y murales.
Asimismo se pueden observar trofeos; vitraux, como el hecho en El Palomar (Buenos Aires) de vidrio y bronce que alcanza una superficie de 105 metros cuadrados, y esculturas con distintos materiales y técnicas de realización.
Convencido de que la obra debe tener un contenido, Pelló siempre ha sido un defensor de pautas tradicionales de representación para la realización de sus trabajos. Un ejemplo de esto es su escultura de Evita instalada en la zona sur de la ciudad.
En un escrito reciente, el artista expresaba estas convicciones: "Cuando una «obra de arte» necesita ser explicada para entenderla, toda la literatura que se precise es la exacta medida de las falencias del autor que no supo poner en su obra lo necesario para que ésta se exprese por sí misma".
En el mismo texto, haciendo referencia a la obra más reconocida internacionalmente del rosarino Lucio Fontana (la serie de tajos y perforaciones) y a la del norteamericano Jackson Pollock, aclara su posición al decir que "esto es una blasfemia al arte y un insulto a la inteligencia humana más elemental".
"Y esta es mi gran preocupación -advierte-, fundamentalmente por los jóvenes, quienes son las víctimas que no tienen más campanas que la malformación y el escasísimo conocimiento de los oficios del arte. Además, son inculcados al facilismo y estimulados al disparate por sectores interesados en hacer retroceder junto al arte, la educación en todos lo niveles, lo humanístico y lo espiritual, en consecuencia toda la cultura, que es la que involuciona invadida de manera catastrófica, facilitando a estos sectores destrozar el sentido nacional tratando de lograr una juventud amorfa, sin valores ni respetos, indolente y maleable".

Pelló y algunos de sus trabajos que se verán mañana.