Año CXXXV
 Nº 49.335
Rosario,
miércoles  19 de
diciembre de 2001
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Retorna la calma a Haití tras el intento golpista

Puerto Príncipe. - Los bancos y comercios de Haití reabrieron sus puertas ayer y las calles estaban repletas de personas que hacían sus compras de Navidad, un día después que las fuerzas de seguridad rechazaron un aparente intento de golpe de Estado. Las autoridades dijeron que nueve personas murieron en el asalto al Palacio Presidencial e incidentes callejeros en Puerto Príncipe y otras ciudades, pero que el presidente Jean-Bertrand Aristide estaba ileso y con el poder intacto.
Cerca de 30 hombres armados atacaron el palacio en el centro de Puerto Príncipe antes del amanecer del lunes tras un fallido intento de entrar en la cercana Penitenciaría Nacional, dijo la policía. Muchos de los atacantes, que según la policía vestían uniformes militares similares a los del desintegrado ejército haitiano, escaparon tras matar a dos policías en el lugar.
La policía dijo que uno de los atacantes murió en un encuentro con las fuerzas de seguridad que los combatían. Dos transeúntes también fallecieron en medio del tumulto y dos presuntos colaboradores de los asaltantes murieron cuando una multitud que se concentró en el lugar les prendió fuego, dijeron la policía y testigos.

Retorno al pasado
La violencia, 10 meses después que Aristide comenzó su segundo mandato, provocó temores de un regreso al sangriento pasado de la nación caribeña. Aristide, un ex sacerdote católico, declaró su victoria en las elecciones de noviembre, boicoteadas por los principales partidos de oposición, enfurecidos por irregularidades en los comicios parlamentarias de mayo del 2000.
El partido Familia Lavalas de Aristide, cuya base de apoyo está en las capas más pobres de la población, y la opositora alianza Convergencia Democrática han estado enfrentados desde entonces.
Muchas de las barricadas levantadas el lunes por las multitudes habían desaparecido de las calles el martes, pero al menos un vehículo calcinado permanecía en las calles de la capital.
El palacio presidencial presentaba algunos daños, con ventanas rotas y marcas de balas en las paredes, dijeron funcionarios. (Reuters)


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