Año CXXXV
 Nº 49.328
Rosario,
miércoles  12 de
diciembre de 2001
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Plantas medicinales
Anis: Hierba dulce y aromática
Los frutos y semillas se utilizan como expectorante y para la digestión

El anís es una hierba anual de la familia de las umbelíferas. Su nombre científico es pimpinella anisum L. y se la conoce también con los nombres de: matalúa, hierba dulce, pimpinela, hinojo dulce, comino dulce. Es originaria de Medio Oriente y muy usada por los egipcios en la medicina popular y como condimento.
Es una planta anual que crece hasta 30 cm. en estado silvestre y hasta 80 cm. en el cultivado; posee un tallo muy ramificado, erguido, redondo y estriado. Las hojas no poseen pecíolo, son muy redondeadas en la base y pinadocortadas (cortadas en forma de pino) más arriba.
Sus flores son pequeñas, blanco-amarillentas, estrelladas y se ubican en umbelas flojas y radiadas. Florece en verano. El fruto o semilla es verdoso, ovoide, cubierto de una leve vellosidad y muy aromático, al igual que el resto de la planta. Cada medio fruto muestra cinco costillas en relieve.
Para el cultivo del anís es ideal el clima mediterráneo, sin demasiada humedad ni fríos excesivos; pero sí con muchas horas de sol y cielo sin nubes. No le es propicio la humedad ni demasiada sequedad en los suelos. Tampoco se desarrolla en los terrenos impermeables donde puede producir charcos. Se aconseja sementar en primavera en tierra floja, permeable y rica en cal; en lugar asoleado y protegido. Las semillas sólo maduran en veranos cálidos.
El anís verde es originario del medio Oriente desde donde fue introducido a Europa y se cultiva en todos los países de la cuenca mediterránea. España es uno de los principales productores del mundo. En la actualidad también se cultiva en el norte de Africa, India y América del Sur.
Medicinalmente se usan los frutos o semillas que se cosechan al madurar en el otoño.

Efectos terapéuticos
El anís contiene un aceite volátil compuesto por 70-90% de anetol. También presenta pequeñas cantidades de almidón, azúcar y hasta 19% de materias proteicas. Se encuentran furanocumarinas, flavonoides, ácidos grasos, fenilpropanoides, esteroles y resinas. El anetol y en general toda la semilla es levemente estrogénico, de allí el uso de la hierba como estimulante sexual y galactógeno (aumenta la producción de leche materna). El azúcar contenido en los frutos justifica el nombre de "hierba dulce" ya que le confiere sabor dulzón a la esencia.
Entre las cualidades del anís pueden destacarse las siguientes: reduce la flatulencia; es tónico estomacal, digestivo, antiespasmódico, hepatoprotector, mucolítico, diurético y galactógeno.
También se recomienda su uso como regulador de las funciones menstruales, como antiséptico, para la escabiosis (para la sarna), como funguicida (para los hongos), vermífugo (parásitos) y aromatizante, refresca el aliento. La infusión se da para aliviar los cólicos en los bebés y a toda edad se usa para las náuseas y la indigestión. También tiene su utilidad en personas que dejan de fumar puesto que limpia el alquitrán y las irritantes mucosidades bronquiales así como ayuda en la regeneración de las células de las mucosas.

Formas de uso
Se utiliza para la tos, como expectorante, para la digestión y como carminativo (para gases): preparar la infusión agregando a una cucharadita o 15g de semillas molidas una taza de agua hirviendo. Dejar reposar tapada 15 minutos. Tomar una taza 3 veces en el día bien caliente. Para aumentar el efecto expectorante beber una taza grande, bien caliente, al acostarse.
También es efectivo para la gastritis: preparar un cocimiento con 20g de semillas hervidas durante 1 minuto con 2 taza de agua. Dejar reposar 10 minutos y se toma una taza 2 veces en el día.
Para uso externo en contusiones, sarna, piojos: preparar cataplasmas y aplicar con frecuencia. Para preparar las cataplasmas machacar 15g de semillas en un lienzo limpio y colocar sobre la zona afectada. Dejar 15 minutos.
El anetol en estado puro puede producir convulsiones. Irritación de la piel, de la mucosa respiratoria y gastrointestinal. Por eso no se recomienda tomar el aceite esencial. Los licores hechos con anís son desaconsejables pues a los efectos nocivos del anetol, se unen los del alcohol. No conviene utilizar en casos de trastornos renales ni durante el embarazo.

Curiosidades
El anís era ya cultivado en Egipto 2000 años antes de nuestra era. Textos de medicina faraónica indican que las semillas se usaban como diurético, para tratar problemas digestivos y aliviar el dolor de muelas. En Grecia, Dioscórides (siglo I), escribió que el anís "calienta, seca disuelve; facilita la respiración, alivia el dolor, provoca orina y calma la sed".
Dicen las creencias populares que quien se lava con una cocción de semillas de anís se queda joven y potente. Antiguamente se creía que despertaba el deseo del acto sexual. Los romanos lo usaban como aromático y remedio digestivo.
El anís se hizo conocido en toda Europa por un edicto de Carlomagno, que ordenó la siembra de todas las hierbas que se cultivaban en el convento de San Gall, en el siglo IX. En Inglaterra era tan valioso que se gravó con impuestos. Con el humo del anís que se quemaba se apaciguaba el dolor de cabeza; triturado y mezclado con aceite de rosas se lo recomendaba como gotas calmantes para el oído.
La esencia de anís es muy soluble en alcohol pero no se disuelve en agua. Cuando se vierte en agua cualquier anisado, ésta se torna lechosa, tanto más cuanto mayor es la riqueza en esencia del aguardiente. El agua de anís preparada con aguardiente de anís y agua en partes iguales, es útil como digestivo.

Griselda T. Franchini
Farmacéutica



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