La elección del sucesor del director técnico Carlos Bianchi, que se irá el 31 de diciembre próximo, es la prioridad de los dirigentes de Boca Juniors, que comenzaron a entablar contactos con varios entrenadores, entre ellos Osvaldo Sosa, Alfio Basile y el ex jugador Alberto Márcico, entre otros.
Según revelaron diversas fuentes consultadas, el que hasta el momento tiene mayores posibilidades de acceder al cargo es el actual entrenador de Chacarita Juniors, Osvaldo Chiche Sosa, con quien un dirigente de peso en la estructura xeneize se entrevistó para conocer su programa de trabajo y saber sus pretensiones económicas.
Se le dijo que Boca no está dispuesto a abonar una suma superior a los 600.000 dólares por temporada, y que la escala de premios se regirá por el sistema de "objetivo cumplido", es decir que si el equipo sale campeón cobrará una determinada cifra y si no es así percibirá un monto menor, de acuerdo a la ubicación del equipo en la tabla de posiciones.
Los informantes no revelaron la respuesta de Sosa, pero comentaron que el director técnico se mostró "complacido" por el interés xeneize y que estaría dispuesto a aceptar la sugerencia de los dirigentes de formar parte del futuro plantel con jugadores juveniles.
Los dirigentes también se habrían entrevistado con el ex director técnico del seleccionado argentino, Alfio Basile, pero sólo para conocer sus aspiraciones, aunque éste no tendría mayores chances debido a la resistencia que su nombre encuentra en gran parte de la directiva boquense.
Por su parte el ex jugador Alberto Márcico mantuvo una reunión con un alto dirigente que viajó con el plantel a Japón, y le manifestó que está de acuerdo en asumir la conducción de Boca si es que resulta elegido, ya que posee un cuerpo técnico apto para esa misión.
Ese directivo suele jugar al fútbol con Márcico dos o tres veces por semana en su casaquinta.
Cuando conocieron la decisión de Carlos Bianchi de irse de Boca, los dirigentes pensaron en Hernán Bolillo Gómez, el director técnico de Ecuador, pero no lo llamaron porque el seleccionado de ese país se clasificó para el Mundial de Corea-Japón 2002.
La confirmación de que Bianchi no dará marcha atrás en su deseo de concluir su vínculo contractual con Boca se la dio el propio entrenador al presidente, Mauricio Macri, en Tokio, cuando el dirigente intentó esta semana, por última vez, torcer la decisión del director técnico más exitoso en la historia de Boca. (Télam)
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La Ciudad
