El gobierno nacional presentó ayer las características formales del tramo local del canje de deuda, cuya suscripción se realizará entre el lunes 19 y el viernes 23 de noviembre para los bancos y compañías privadas, mientras que los minoristas podrán hacerlo hasta el 30 de noviembre. El canje fue presentado por el ministro de Economía, Domingo Cavallo, el viceministro, Daniel Marx y el subsecretario de Financiamiento, Gustavo Stafforini, durante una conferencia de prensa que ofrecieron en el Palacio de Hacienda.
Esta primera fase de la operación está dirigida a inversores domésticos, que tienen en su poder títulos de la deuda pública argentina por unos 60.000 millones de dólares, por los que se ofrecen préstamos garantizados por recaudación impositiva a una tasa del 7 por ciento anual.
La segunda parte del programa de reestructuración de la deuda estará enfocada en los tenedores internacionales y es un proceso que por ahora está muy verde.
Las garantías de los préstamos estará constituida por el producido del impuesto al cheque y la coparticipación de impuestos correspondientes a la Nación.
Concluidas las dos etapas de canje, el gobierno espera poder computar un ahorro para las cuentas públicas para el año 2002 de entre 2.500 y 3.500 millones de dólares en concepto de intereses.
Los funcionarios precisaron que se estableció que los intereses de los préstamos se pagarán desde el 1º de abril de 2002, en forma mensual y que por razones de administración los intereses devengados entre el 6 de noviembre de 2001 y el 30 de marzo 2002 serán capitalizados. Además se reiteró que las Letes y otros títulos públicos con garantías especiales no participan de la operación.
Marx explicó que los bancos enviarán diariamente al Banco Central el producido del impuesto al cheque al igual que lo hará la Tesorería con la porción correspondiente a la Nación de la coparticipación de impuestos y de allí el BCRA dispondrá de los fondos para hacer frente a los pagos de intereses y amortizaciones.
El viceministro destacó que en esta operación, de la que participan 79 títulos por 60.000 millones de dólares, "no hay un monto preestablecido". Y agregó que para considerar este canje exitoso, "cualquier monto que se ofrezca estará bien".
Marx adelantó que "en los próximos días se hará una operación similar con los títulos de la deuda provincial". Para esto, además de la rebaja en la tasa, los intereses de estos préstamos garantizados comenzarán a pagarse a partir de abril del año próximo, al tiempo que las amortizaciones de capital sufrirán un aplazamiento de tres años.
Esta es la primera fase de una operación de reestructuración de deuda por 95.000 millones de dólares, que el gobierno confía en continuar en los próximos tres meses a nivel internacional.
Esperan tres meses más de volatilidad
En tanto, minutos antes de partir hacia Otawa, Canadá, para participar en la asamblea del FMI y el BM, Cavallo aseguró que el primer tramo del canje de deuda va a ayudar "no sólo a abaratar el costo de la deuda" de las provincias y del Estado nacional sino que servirá también para restringir la volatilidad de los mercados que, pronosticó, perdurará "a lo sumo tres meses".
Enfatizó que "se trata de una operación en la que ganamos todos, algunos pueden llegar a pensar que el hecho de que bajan las tasas es como una imposición a quienes nos han prestado, pero en realidad se trata de darle seguridad a los inversores y permitir que la Nación y las provincias puedan mejorar su financiamiento".
Más tarde el viceministro Marx también comunicó que entre las 15 y 16 se habilitará la Oficina de Crédito Público ubicada en el Palacio de Hacienda para atender preguntas de los interesados a participar de la operación.
La Ciudad
