Año CXXXIV
 Nº 49.296
Rosario,
sábado  10 de
noviembre de 2001
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Otro acusado por el brutal asesinato de una docente

Buenos Aires.- Uno de los tres acusados de violar y asesinar a la docente Fabiana Gandiaga incriminó ayer a otro empleado del club Geba en el crimen, al ampliar su declaración indagatoria ante el juez de instrucción Alberto Seijas.
Fuentes judiciales informaron que Fernando Antúnez, de 25 años, el único de los tres acusados que confesó haber presenciado el ataque y sindicó como autores del crimen a los otros dos detenidos, acusó ayer también a otro empleado de Geba, de nombre Enzo, de haber asesinado a Gandiaga.
Sin embargo, allegados a la causa relativizaron los dichos de Antúnez, consideraron "pobre y breve" su declaración -que había sido pedida por él mismo- y juzgaron su acusación como una "medida defensiva de alguien que pretende quitarse responsabilidad" en el hecho.
"La explicación de Antúnez no le modificó la situación a ninguno de los imputados, ni siquiera al empleado de Geba al que acusó porque el día del crimen ese hombre no trabajó en el club", advirtieron las fuentes.
Antúnez había pedido ampliar su declaración indagatoria la semana pasada para aportar nuevos datos a la causa.
En su primera entrevista con el juez, se ubicó "como un testigo" del hecho y señaló como culpables de la violación y asesinato de la maestra a Carlos Vallejos, de 21 años, y Miguel López, de 27, al igual que él empleados de una empresa de limpieza contratada por Geba.
El juez Seijas tiene plazo hasta el martes próximo para decidir si procesa o no a los imputados. De ellos, Vallejos y López negaron cualquier vinculación con el crimen.
Los tres hombres están acusados de violación calificada -por haber sido cometida por más de dos personas- y homicidio simple.
El abogado del esposo de Gandiaga, Juan José Devalle, negó por otra parte versiones según las cuales iniciará una demanda civil contra Geba y argumentó que ni siquiera analizó esa posibilidad con su cliente.
La maestra Gandiaga desapareció entre las 15 y las 15.30 del sábado 23 de octubre, cuando asistió a Geba para presenciar una competencia de taekwondo de la que participaba su hijo Julián, de 6 años.
Ese día, según la investigación, la mujer se perdió en el club y luego, engañada, fue atacada sexualmente y asesinada. (Télam)


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