Subieron bonos y acciones, bajaron tasas y riesgo país

La Bolsa de Buenos Aires cerró ayer con una suba del indicador Merval del 3,47 por ciento, tras haber operado con un alza del orden del 6 por ciento a media rueda. Este volátil comportamiento de la plaza local, que concluyó la jornada con una tendencia vendedora, se vio influido por la caída de Wall Street que perdió un 4,40 por ciento para el Nasdaq de las empresas electrónicas y un 1,61 por ciento para el industrial Dow Jones. Al mismo tiempo, se fortalecieron los títulos de deuda argentinos, lo que se vio reflejado en una reducción de la tasa riesgo país de la Argentina que quedó por debajo de la de Nigeria, abandonando así el indeseado primer lugar del ranking mundial.
En este marco favorable, las tasas de interés bajaron a los niveles que tenían en marzo de este año, cuando aún no se había desatado la crisis que eyectó de Economía a José Luis Machinea.
El Merval concluyó la jornada en 251,61 puntos tras recortar la mitad de la suba obtenida a media sesión. El repliegue final se dio tras la aparición de varias órdenes de venta para realizar tomas de ganancias tras dos días seguidos de subas, una situación que provocó que el índice bursátil cayera 0,5 por ciento en los últimos cinco minutos.
Las causas que permitían esta buena labor de la Bolsa porteña eran atribuidas a que el mercado espera con optimismo el futuro anuncio de canje de bonos de la deuda.
Asimismo, se está observando positivamente las negociaciones entre el Ejecutivo nacional y los gobernadores justicialistas sobre las futuras medidas económicas, que serían anunciadas en los próximos días.
Otro factor favorable fue la valoración del riesgo país que mide JP Morgan, que se ubicó al cierre en 1.686 puntos básicos y descendió 84 unidades respecto del cierre del martes.
Los bonos globales acompañaron la tendencia accionaria y cerraron la jornada en suba. Los más largos con vencimiento en el año 2027 crecieron 3,78%, mientras que los 2008 ganaron 2,52%.
En tanto, el call en pesos a un día se ubicó en el 7 por ciento para las entidades de primera línea y en 8,5 por ciento para los bancos de menor rango, contra los 8,5 y 11 por ciento respectivamente que se habían ofrecido en la jornada anterior. Las tasas de los plazos fijos en pesos acompañaron el descenso y quedaron en 1,88 por ciento mensual para las colocaciones de 30 a 60 días.