Los porteños tienen veinte listas para elegir en los comicios de hoy a sus tres senadores nacionales y a trece diputados, pero en tal variedad de propuestas ninguna (ni siquiera la del oficialismo) representa al gobierno nacional.
En el primer turno electoral que enfrenta la administración que encabeza Fernando de la Rúa y en el lugar donde el actual presidente y gran parte de su gabinete desarrollaron toda su carrera política, este dato no puede pasar desapercibido.
Como consecuencia de la aguda crisis que enfrenta el país, la economía se convirtió en el eje de la campaña proselitista más corta que se recuerde y quizás la que menos expectativa ha generado, pero con el agregado de que todos los candidatos, sin excepción, embisten con igual fuerza contra la política oficial en la materia.
Temor oficial
Una extraña alianza
Una extraña alianza
La primer elección, que todo gobierno espera con ansiedad para que su gestión sea revalidada en las urnas, se ha transformado para la actual gestión en una virtual pesadilla porque, además de la difícil situación económica, avizora un panorama complicado en lo político para los próximos dos años.\Como resultado del descontento, la coalición de partidos que llegó al poder en 1999 está hoy desperdigada en varias de las listas: la Alianza original sólo contiene a la UCR y a un sector del Frepaso, el ARI se quedó con el socialismo democrático (ex Frepaso) y el Polo Social con otro sector disidente del frentismo.\
La Ciudad
