Granadero Baigorria. - Sus prioridades, ayudar a los necesitados. En los últimos cuatro años las diez mujeres que integran Mano Solidaria han dado respuesta a muchos casos. En pro de asistir a quienes lo requieran, su tarea ya ha obtenido el reconocimiento de Granadero Baigorria. Ahora van por más, iniciaron una campaña de recolección de miles de juguetes para dar en Navidad a los chicos internados de hospitales y hogarcitos. También harán un té canasta para recaudar fondos para jóvenes del Hogar Escuela.
Sus utopías posibles chocan diariamente con la realidad que golpea y agobia, la misma que padecen millones de argentinos. Pero ellas no se dejan vencer y logran concretar sus ideales quitando horas a sus ocupaciones. Siempre destacan que no tienen vinculaciones, fines políticos ni de lucro.
En junio pasado realizaron un té canasta para ayudar a chicos de la escuela especial Nuestra Señora de la Esperanza, de Granadero Baigorria, para que puedan acceder a diversas medicaciones neurológicas que necesitan y que muchos padres sin trabajo no pueden comprar. El desafío fue un éxito, asistieron unas 250 personas y se recaudaron 1.500 pesos, de los cuales una parte se entregó a una farmacia para que los padres fuesen retirando los remedios que sus hijos necesitan. Además, para el Día del Niño organizaron una fiesta destinada a 670 pequeños del Hogar Escuela de Baigorria.
En busca de un juguete
Dentro de una larga lista de actividades solidarias, desde principios de octubre todos los viernes, de 9 a 12, en el Palacio Minetti de Rosario, Córdoba al 1400, realizan una campaña para recolectar juguetes, que pueden ser nuevos o usados en buenas condiciones. La tarea en favor de chicos internados la efectuarán hasta el 30 de noviembre. El objetivo es repartir los juguetes los primeros días de diciembre en el Hogar Escuela y el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria, en el Hogarcito San Roque de niños discapacitados de Capitán Bermúdez y los hospitales Zona Norte y Víctor Vilela de Rosario.
El año pasado también repartieron juguetes, pero sólo en el hospital de Baigorria, ahora quieren ampliar la lista y darle alegría a más pequeños. Las diez integrantes de Mano Solidaria son: Graciela Pedrini, Nilda de Bragaccini, Stella Maris de Martínez, Jorgelina de Cruz, Elisabet de Martínez, Mariana García Vera, Mónica de Bazán, Silvia de Alonso, Mariana Torti y Eugenia de Di Pierro.
"Nos hemos disfrazado varias veces de payasas y de Papa Noel. Esta vez volvimos a ponernos trajes de colores porque nos divertimos transformándonos en payasitas y alegrar a los pequeños. Lo hacemos por amor a ellos y por eso nos atrevemos a tanto. Somos emprendedoras y la prioridad es solucionar los temas que nos presentan. Ante un problema, aparecen nuestras ganas de ayudar", dijo Graciela.
Círculo de afecto
Otra tarea comunitaria que encara Mano Solidaria está orientada a cerrar el círculo de afecto del corriente año organizando un té canasta para el 17 de noviembre. "Queremos darles una opción de conocimiento a los chicos y que se sientan valorados", afirmó Graciela.
El objetivo: lograr que 85 chicos de 7º año de la EGB del Hogar Escuela de Baigorria puedan realizar su viaje de estudio. "La idea es que puedan ir a Buenos Aires o a Paraná, aunque sea por un día. Los chicos nunca han viajado y aunque parezca mentira muchos no conocen el río. Nuestro proyecto es juntar fondos para comprarles los pasajes", aclaró Pedrini.
El encuentro para juntar esos fondos se hará en el Centro de Jubilados y Pensionados de Granadero Baigorria, Belgrano 305. El té canasta incluirá juegos, sorpresas y música a cargo del conjunto local, Nuevo Aguaribay.
El grupo de mujeres está viendo la posibilidad de colaborar también con una nena que necesita medicamentos. "El tratamiento que ella requiere es muy caro, una sola inyección cuesta 600 pesos", ejemplificó Graciela.
Otra tarea de la entidad está destinada a los geriátricos baigorrienses: para Navidad reparten pan dulce casero elaborado por ellas. "Es un pequeño aporte que los viejitos agradecen y disfrutan", acotó Graciela.
Los planes pueden ser variados, pero la premisa de estas mujeres es la misma: colaborar con el prójimo. Desde los festivales, un té canasta, disfrazarse de payasas y hasta colectas de juguetes demuestran que hacen honor a su denominación de Mano Solidaria, y que no hay imposibles cuando quieren ayudar.
La Ciudad
