Héctor Méndez
"Es una inmoralidad pensar en candidaturas para el 2003 cuando todavía no pasó la (elección) del 2001. Hay dos millones de desocupados y hay gente que no sabe cómo llegar al día 15 con lo que gana. Por eso existe tanto asco con la política, porque los políticos viven haciendo especulaciones con lo que van a hacer en el 2003, y al que está desocupado qué corno le importa quién va a ser presidente en el 2003. Lo único que le interesa es que alguien le dé una mano para salir de la situación en la que está".
Así reaccionó Alberto Natale ante la pregunta sobre qué tiene pensado hacer políticamente dentro de dos años, y en especial después de que Horacio Usandizaga y Hermes Binner hayan dicho que serán candidatos a intendente de Rosario en las elecciones del 2003.
Si bien dijo que "respeta" a quienes hacen estos anuncios, el diputado nacional por el PDP advirtió que "para que la gente les crea, los políticos tienen que decir la verdad".
"Este rechazo a mucha dirigencia política -prosiguió- se debe, en parte, a la gravísima situación económica que a todo el mundo pone nervioso, pero en buena medida también a la falta de honestidad de mucha dirigencia, y cuando digo honestidad no me refiero solamente a no robar, sino a no mentir, a no prometer sin fundamento".
Luego de insistir en que "la gente está harta de que mucha dirigencia política le mienta y que anhela que la Argentina cambie", Natale -quien el domingo buscará la reelección por otro período de cuatro años en la Cámara baja- dijo estar convencido de que el partido que lidera, el Demócrata Progresista, hará el domingo una elección "extraordinaria".
Su confianza proviene -explicó- de la impresión que ha recogido después de recorrer la provincia. De todos modos, evitó adelantar cuántos legisladores pedepistas ingresarán a la Cámara de Diputados. "Cuanto más, mejor", se limitó a expresar.
Sobre la situación económica, expresó la necesidad de "poner las cosas en su lugar", y subrayó que la Argentina "no está peor que Nigeria", en referencia a que el riesgo país aquí superó al de la nación africana.
"La Argentina atraviesa una larga crisis, y por ahora no se ve un horizonte -dijo Natale-, pero eso no quiere decir que la situación aquí sea más endeble que la de otros muchos países. Sostengo que nuestra estructura económica es la más sólida de Latinoamérica, más que la de Brasil, México e inclusive que la de Chile, de la que tanto se habla".
Aunque admitió la gravedad de la crisis, remarcó que "no podemos creer que la Argentina sea una catástrofe", y advirtió que para salir a flote hace falta que gobernantes, políticos, empresarios, sindicalistas, periodistas e intelectuales "ayuden a encontrar vías para que la Argentina reaccione".
"Estoy seguro de que si se acertara en cuatro o cinco medidas y al mismo tiempo se generase un clima de confianza la, respuesta positiva sería muy rápida", se esperanzó. El candidato a la reelección dijo más adelante que el presidente De la Rúa tiene que "resolver con medidas atinadas el problema del déficit, afrontar el endeudamiento del sector público, reducir el gasto en lo que sea posible, pensar en una reforma impositiva que permita evitar la altísima evasión, a partir de la solvencia fiscal lograr condiciones objetivas para el crecimiento de la economía con la reducción de las tasas de interés y luego decir que de aquí al 10 de diciembre del 2003 va a gobernar en esa dirección".
Natale aseguró que quiere seguir siendo diputado "para hacer lo que hice hasta ahora". A modo de ejemplo, puso sus "esfuerzos para resolver asuntos de importancia para Rosario": la autopista a Córdoba ("pude frenar el negocio que quería hacer Benito Roggio y hacer una autovía"), la no entrega de los aeropuertos de Rosario y Santa Fe a Eurnekian ("me agarré la cabeza cuando me enteré las inversiones que iban a hacer") y la hidrovía ("le di un impulso muy grande desde la Bicameral)".
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Natale va por una nueva reelección en la Cámara baja. |  | Ampliar Foto |  | |
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La Ciudad
