Año CXXXIV
 Nº 49.248
Rosario,
domingo  23 de
septiembre de 2001
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Justicia Infinita. Especialistas dicen que tiene una imagen inmerecida
El Islam es un misterio para Occidente

Caroline Drees

El Cairo. - Para muchos occidentales, el islamismo conjura imágenes de militantes armados, siniestros líderes religiosos y bombas de fabricación casera.
A donde vuelvan la mirada, parecería que hay musulmanes radicales fabricando explosivos, volando estatuas antiquísimas, o secuestrando aeronaves y turistas. Y en parte de la prensa de Occidente el "islamismo" parece correr a la par del "terrorismo".
Pero los estudiosos de esta religión aseguran que esta imagen es totalmente inmerecida para una fe que prohíbe el suicidio y el asesinato de inocentes.
Después de 1.400 años, el islamismo continúa siendo un misterio para los no musulmanes, que es matizado con connotaciones de maldad.
Los atentados de la semana pasada con aeronaves secuestradas en Estados Unidos han puesto de nuevo al islamismo bajo las candilejas, luego de que Washington aseguró que el militante islámico Osama Bin Laden, "huésped" del movimiento Talibán que gobierna Afganistán, es uno de los principales sospechosos.
Eruditos musulmanes aseguran que ante el tribunal de la opinión pública, el islamismo ya ha sido condenado. Y pocos se percatan de que 1.000 millones de personas en el mundo entero, desde Asia hasta Estados Unidos, profesan la fe musulmana. Los analistas indican que la ignorancia y las concepciones erróneas sobre el islamismo son extensas, sobre todo en lo referido a sus enseñanzas sobre la violencia.
El islamismo -explican- es una religión con base en la tolerancia y el respeto, que ha sido satanizada por siglos de desinformación.
El término árabe "Islam" significa sumisión a la voluntad de Dios y su raíz es la misma de la palabra para paz: "salaam".
Juzgar al islamismo por quienes perpetran atentados explosivos suicidas, los secuestradores o los miembros del Talibán es equivalente a basar el entendimiento del cristianismo en las Cruzadas, la Inquisición española o sectas como la Rama Davidiana, argumentan.
"Hay un verso en el Corán que dice que cualquiera que mate a una persona es considerado como si hubiese matado a toda la humanidad. Cualquiera que salve a una persona, es como si hubiese salvado a la humanidad", dijo Mohamed Serag, catedrático de Estudios Islámicos en la Universidad Americana de El Cairo, quien agregó que "esta fe también prohíbe el suicidio".
"El Corán dice que si alguien muestra alguna inclinación hacia la paz, aún si uno teme que no podría ser sincero, entonces uno debe aceptar su oferta", explicó, antes de indicar que "eso demuestra que la vida humana es muy importante para el Islam".

Los atentados contradicen el Islam
Clérigos musulmanes de todo el mundo, incluyendo los líderes religiosos de grupos fudamentalistas, han condenado los atentados de la semana pasada como acciones horrendas que contradicen el islamismo.
El máximo funcionario judicial de Arabia Saudita, jeque Saleh bin Mohammed al-Luhaidan, habló por muchos cuando explicó: "El islamismo no condona el asesinato, excepto (para castigar) a quienes matan o atacan a los musulmanes y, por lo tanto, tales crímenes, que no distinguen entre un bebé, una mujer o un anciano se consideran entre los crímenes más enormes".
En tanto, el jefe de la Liga Mundial Islámica Rabite, Abdullah Bin Abdul-Muhsin el-Turkia, aseguró el lunes pasado en Sarajevo: "El islamismo no admite el terrorismo y su historia lo comprueba. Tampoco admite la injusticia y la agresión contra otras gentes".
Así como el Antiguo Testamento insta a castigar "ojo por ojo", el Corán condona algunas formas de retribución violenta. Pero eruditos musulmanes hacen énfasis en que el islamismo sólo permite la violencia en defensa propia y jamás permite provocar víctimas civiles o admitir el suicidio.
"Estamos horrorizados por estos atentados, que ninguna religión, lógica humana o justificación política pueden sancionar", expresó Mohammed Hussein Fadlallah, un clérigo shiíta de alto rango y antiguo mentor espiritual del movimiento Hezbolá, quien aseguró que "ninguna enseñanza religiosa puede justificar los atentados".

Fanáticos en nombre de Alá
Teniendo en cuenta estas posiciones oficiales, ¿por qué los musulmanes que efectúan secuestros en las Filipinas, los que perpetran atentados explosivos suicidas en Israel y los culpables de organizar atentados explosivos en el golfo Pérsico, Africa o Estados Unidos creen que están acatando órdenes de Dios? \"Hay fanáticos que creen que se les ha humillado, que buscan cualquier justificación para su deseo de tomar venganza. La cosa más próxima a su mente, la única filosofía que tenemos, es el Islam. De manera que extraen de ahí su justificación, de su comprensión errónea de los principios islámicos", explicó un teólogo.
Los analistas aseguran que hay ciertos conceptos en el islamismo, tales como el martirio, la Jihad (guerra santa) y la defensa de la fe que se prestan a "interpretaciones equivocadas" y que muchos movimientos políticos y religiosos se han apropiado de esas nociones para sus causas particulares.
"El mal uso de la religión no es inusitado. La gente que tiene una base y motivos despreciables tratan de asignarles alguna nobleza y respetabilidad cubriéndolas con matices religiosos. Tales gentes sólo dicen que son musulmanes. Pero no lo son", señaló Zaki Badawi, director de la Universidad Musulmana de Londres. "Si ustedes se acuerdan, hasta Stalin, un ardoroso ateo, movilizó a la Iglesia Ortodoxa rusa en busca de conseguir que la gente luchase contra los nazis", recordó Badawi. (Reuters)


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