Año CXXXIV
 Nº 49.240
Rosario,
sábado  15 de
septiembre de 2001
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El barrabrava de Central estuvo prófugo durante dos días
Detienen al "Chaperito" Bustos por amenazas contra su mujer
En su prontuario detectaron la omisión de una condena que aún debe cumplir

El barrabrava de Rosario Central Juan Alberto Chaperito Bustos se presentó ayer a la policía y quedó a disposición del juez en lo Correccional Nº5, Eduardo Costa, quien tramita una causa en la que está imputado de amenazas coactivas contra una mujer. Paralelamente, fuentes judiciales expresaron ayer su sorpresa porque en el prontuario de Bustos no figura una condena en suspenso que aún se encuentra cumpliendo y dijeron que se disponían a investigar los motivos por los cuales esta sentencia no fue incluida en sus antecedentes.
Bustos estuvo técnicamente prófugo un par de días porque tenía una orden de captura judicial y no se sabía cuál era su paradero. Durante ese lapso, allegados al hijo del jefe barrabrava Juan Carlos Chapero Bustos dijeron que Chaperito era víctima de una persecución judicial y que no había ningún motivo para que se librara esa orden.
Uno de los motivos por los cuales buscaban a Bustos es porque recientemente viajó al Distrito Federal de México para ver el partido entre Rosario Central y Cruz Azul por la Copa Libertadores. Según él mismo lo admitió en una entrevista con este diario, lo hizo sin solicitar autorización judicial para salir del país, algo que obligatoriamente debió hacer debido a que cumple una condena en suspenso que todavía está vigente.
A raíz de estas declaraciones, y de los dichos de testigos que dijeron haber visto a Chaperito en la capital mejicana, el fiscal de Cámaras José María Peña pidió informes al juez que lo condenó (Alberto González Rímini, del juzgado de Sentencia Nº6) y al juez de ejecución penal un informe acerca de si habían concedido la autorización respectiva para que pudiera viajar al exterior.
Pero en el medio, mientras estos pedidos de informe se tramitaban, otro magistrado solicitó la detención de Chaperito en una causa en la que se investiga una denuncia por amenazas coactivas contra su concubina. Por esas horas, cuando se enteró que la policía saldría a buscarlo, Bustos hizo saber a un cronista de este diario que se entregaría ante el juez porque no tenía "ningún motivo" para ocultarse. Ayer a la mañana, se presentó junto a su abogado, Paul Krupnik, en la comisaría 6ª, donde anoche continuaba bajo arresto. Según el abogado, Chaperito será indagado el lunes por el juez Costa acusado por amenazas simples.
Mientras tanto, en los tribunales locales circuló ayer la versión, que no pudo ser confirmada por este diario, acerca de una grave irregularidad en el prontuario de Bustos. Según esa especie, en el registro de antecedentes no figuraba la condena en suspenso que le aplicó el juez González Rímini. De acuerdo a lo que sostenían algunos portavoces judiciales, esto podría dar lugar a una investigación para determinar quién es el responsable de la omisión y por qué razón este antecedente no se incluyó en el prontuario.
La aparición de la condena en esos registros no es un dato menor ya que al conocerse la vigencia de una condena en suspenso posiblemente Chaperito no podría hacerse acreedor del beneficio de la excarcelación ante una nueva imputación como la que ahora pesa sobre él en el juzgado en lo Correccional Nº5.



Bustos podría quedar preso si tiene una pena pendiente.
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