Adiós a la inocencia

El pop adolescente ya no es el de antes. Cuando unas semanas atrás uno de los Backstreet Boys, A.J. McLean, debió ser internado en una clínica de desintoxicación por su adicción al alcohol, quedó al descubierto una de las mentiras del star system versión teenager: los Backstreet Boys no son esos chicos que nos vendió su aparato publicitario, esos que solamente toman agua mineral y mascan chicles.
'NSync tampoco se muestra ya como una banda de chicos que presenta su disco ante las adolescentes enloquecidas de una escuela secundaria. De hecho, el grupo celebró la salida de su nuevo álbum codo a codo con Hugh Hefner, el dueño del imperio "Playboy", y su ejército de conejitas, en una fiesta privada en el club Moomba de Los Angeles.
Algunas letras de "Celebrity" tampoco responden al tradicional patrón de la canción romántica. El hit "Pop", por ejemplo, con letra de Justin Timberlake, desafía a todos los que no creen en la música del grupo y además la critican. Ahora Timberlake está escribiendo canciones para el próximo álbum de su novia, Britney Spears, que también espera cambiar de sonido de la mano del productor BT, y además planea reaparecer con una imagen más sexy, diferente a la bebota inocente que personificó hasta ahora.