Año CXXXIV
 Nº 49.194
Rosario,
martes  31 de
julio de 2001
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La obra social les adeuda un millón de pesos a los laboratorios rosarinos
Los bioquímicos demandarán al Pami
La presentación ante la Justicia se concretará la semana próxima si no se efectiviza un plan de pagos

Las autoridades del Centro de Trabajo Bioquímico amenazaron con acudir a la Justicia la semana próxima si las autoridades de los policlínicos del Pami local no brindan un cronograma de pagos de las deudas contraídas por las prestaciones brindadas en febrero y marzo de este año. "Nos deben un millón de pesos pero reclamamos el pago urgente de los 480 mil", explicó el secretario de la entidad, Carlos Sosa, quien además subrayó que hay 120 laboratorios en la ciudad que corren riesgo de cerrar sus puertas debido al rojo que mantiene el Pami con ellos.
Sosa recordó que el millón de pesos que la obra social de los jubilados adeuda a los bioquímicos locales se conforma por facturas impagas correspondientes a todo 1996, servicios de febrero y marzo de 2000 y parte de este año. "Desde enero no entregan ni un peso", protestó el prestador, antes de reclamar "un plan de pagos urgente".
El secretario del Centro de Trabajo Bioquímico apuntó que las autoridades de los policlínicos "ofrecieron entregar 15 mil pesos para ser distribuidos entre 270 laboratorios y eso es inaceptable".
Trascartón, destacó que la situación del sector es crítica porque "hay 120 laboratorios de distintos barrios que podrían cerrar, porque su funcionamiento depende casi exclusivamente del Pami".
Sosa indicó que los laboratorios que cortaron los servicios a la obra social de los jubilados hace 60 días atendían hasta entonces un promedio diario de 450 abuelos. Ahora los análisis se practican sólo en los policlínicos Pami I y II. "Hay pacientes a los que les extrajeron sangre el 4 de junio y aún no les dieron los resultados", ejemplificó el bioquímico.
"Llamamos cuatro veces por día a las autoridades del Pami para que nos informen si nos van a pagar y dicen que para nosotros no hay plata", se quejó Sosa, quien adelantó que si en el transcurso de esta semana no se oficializa un cronograma de pagos, las autoridades del Centro de Trabajo Bioquímico acudirán a la Justicia para exigir el pago de las cuentas atrasadas.
Por su parte, el interventor de la Uppri, Luis Fernández Risso, se defendió y redobló la apuesta: "Mientras los bioquímicos no garanticen el levantamiento del corte del servicio, no puedo pagar ni un centavo".
A renglón seguido destacó que desde el Pami central cada vez recortan más los fondos que destinan a los policlínicos, y confesó que "a esto ni Mandrake lo puede manejar".


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