¿Cómo desembarcar con su empresa en EEUU y no morir en el intento? Este podría haber sido el título de la presentación que desarrolló en Rosario una de las integrantes de la delegación de 150 empresarios que arribó del Norte junto con el gobernador de Florida, Jeb Bush, para desmitificar el temor que muchos empresarios locales tienen a la hora pensar en abrirse camino en las tierras de Disney y concretar negocios.
La constitución de una subsidiaria, sus costos, mecanismos de distribución, estándares de calidad, fueron los puntos centrales que analizó Genilde Guerra junto a Alejandro Ensinck, de la consultora local Naiku, en una entrevista con La Capital antes de la charla con los hombres de negocios locales en la sede de Aricana.
Según esgrimió la abogada brasileña, el mercado de EEUU está ávido por recepcionar a empresarios latinoamericanos que deciden trascender sus fronteras. Para esto, Guerra señaló que existe un aceitado mecanismo para la conformación de una sociedad en EEUU.
En sólo 24 horas y por un valor que ronda entre los 500 y mil dólares, un empresario pyme puede armar una base de operaciones en el mayor mercado del mundo. Incluye teléfono, página web, trámites legales y asesoría jurídica y del mercado para exportar e importar productos tanto para EEUU como para otros países.
Guerra reconoció las barreras importantes para ingresar al mercado estadounidense no suelen ser las arancelarias sino los estándares de calidad. "Es algo que los empresarios argentinos deben comprender, ya que a lo mejor no son necesarios para un mercado pequeño, pero cuando se busca ampliar los horizontes e ingresar a un mercado muy grande, los estándares de calidad son una exigencia más de los propios consumidores".
Los sectores con más posibilidades
La ejecutiva colocó a los sectores tecnológicos, agroindustriales, médicos, de telefonía y computación, como los más interesantes para realizar negocios. Respecto a las exigencias de la Food and Drug Administration para los productos alimentarios, Guerra explicó que los procesos son sencillos y ágiles.
La ejecutiva explicó que la radicación de una subsidiaria en los EEUU genera para la empresa una apertura hacia los mercados de capitales más rápidamente, con el valor agregado de unas tasas de interés diametralmente opuestas a las que hoy deben afrontar quienes buscan inversores en la Argentina.
Además, Guerra remarcó que el anclaje en el País del Norte se traduce también en una mayor confianza de cara a los potenciales clientes estadounidenses. Dentro de las pautas que consideró indispensables para que los empresarios no se lleven sorpresas es la constatación de los acuerdos por medio de contratos.
"La mayor dificultad que tienen los empresarios argentinos es la falta de conocimiento y de orientación de sus negocios. Tienen ideas muy focalizadas", consideró la ejecutiva, y estimó que antes de emprender cualquier negocio es necesario tener una visión clara sobre lo que se está buscando "tanto para no perder dinero y tiempo".
En este sentido, Guerra sostuvo que otras de las ventajas con las que un empresario se puede encontrar en Florida es que los estudios de abogados tienen una gran tradición en comercio exterior.
La Ciudad
