Prueba superada

Primera B: Argentino ganó y comenzó a soñar

Elbio Evangeliste

Todos juntos, abrazados en el anillo central, dedicándose el triunfo a ellos mismos, cumpliendo casi con una especie de rito, los jugadores de Argentino cerraron una tarde que sirve para empezar a creer. Una tarde en la que se dieron el gusto de sumar de a tres. Nada más ni nada menos que en la primera fecha del torneo de Primera B. La victoria, trabajada pero justa, frente a Deportivo Merlo por 1 a 0 fue el primer paso de un largo camino. El que deberá tener a un salaíto verdaderamente protagonista para mantener la categoría.
Si bien lo más importante fueron los tres puntos, el árbol no debe tapar el bosque. Argentino ganó con justicia, pero a la vez quedó claro que debe afianzarse como equipo para no pasar por la situación que le tocó vivir ayer, cuando tuvo que lidiar demasiado frente a un inexpresivo Deportivo Merlo.
El mensaje estaba claro antes de empezar. Había que ganar. Por eso el albo salió decidido a todo, y de esa manera tuvo la chance de convertir en varias oportunidades en los primeros 20 minutos, los mejores de Argentino. Al minuto, Mellado; a los 8, Ojeda; a los 11, Stachiotti; a los 13, Corman. Todas situaciones para comenzar a liquidar el pleito, pero no pasaba de eso. Apenas si terminaron siendo algunas oportunidades.
Por eso el partido se fue complicando, no por la resistencia de los de barrio San Martín, sino por la propia ineficacia salaíta. Deportivo Merlo era una verdadera sombra, pero lentamente Argentino fue mermando su rendimiento, especialmente de tres cuartos de cancha hacia adelante.
Y cuando todo parecía que la extensa racha sin victorias se extendería, apareció el yerro de Zamudio. A los 27 del complemento Mellado envió el centro desde la derecha y el limitado defensor, en el intento por despejar el peligro, terminó metiendo la pelota por encima de la humanidad de Matías Giordano.
La diferencia de ayer con respecto a otras tardes no muy lejanas era que Argentino mostraba que estaba en condiciones de aguantar el resultado, gracias a la buena labor en defensa, donde el Pollo Stachiotti y Corman se erigieron como las grandes figuras.
Así transcurrió el primer tramo de esta especie de raíd de aventura que los salaítos tienen por delante. Hasta el más optimista sabe que el de ayer fue apenas el primer escalón. Que para llegar a la cima hace falta esto y mucho más. Así y todo lo hecho por Argentino en Merlo podría definirse tan sólo con dos palabras: prueba superada.