Los diversos procesos de degradación de suelos, tanto por erosión hídrica como eólica, se traducen en la pérdida de unas 500 hectáreas productivas por día. Así lo señaló el Inta Marcos Juárez da través de un informe difundido en ocasión de conmemorarse el Día del Suelo.
En ese sentido, los técnicos del ente remarcaron la importancia de realizar tareas conservacionistas que, según subraya el informe, deberán ir aumentando gradualmente para preservar la productividad de todas las áreas agrícolas ganaderas afectadas.
De acuerdo con los números que maneja el Inta Marcos Juárez, las erosiones hídrica y eólica, sumadas al uso excesivo de los recursos naturales, significan una pérdida de 500 hectáreas de suelo productivo por día, con un costo por año de alrededor 1.000 millones de pesos (600 mil sólo en la región pampeana), en concepto de lucro cesante de producción. Un 20% del territorio nacional está erosionado por ambos procesos de degradación, lo que representa un total de 60 millones de hectáreas, con una tasa anual de crecimiento de unas 200 mil hectáreas.
Para tener una idea de la gravedad del daño, el territorio afectado por la erosión en el país equivale a la superficie completa de las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa Fe, precisa el informe del Inta.
Sobre esta problemática, el organismo técnico recordó que no sólo lleva a cabo estudios en el Centro Nacional de Investigaciones que posee en Castelar, sino que además tiene en marcha desde hace años proyectos específicos con base en las Estaciones Experimentales de distintas regiones del país.
Se menciona, además, que el suelo es el único recurso no renovable que tiene el sector productivo, un dato a considerar en un país que obtiene la mayor parte de sus ingresos de divisas por medio de la explotación agropecuaria.
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La Ciudad
