Gabriel Lerman
Los Angeles.- Cuando se supo, los periódicos más importantes de todo el mundo publicaron la noticia en la primera plana de sus suplementos de espectáculos. No era para menos. Que Angelina Jolie hubiera aceptado convertirse en Lara Croft, una de los heroínas más populares del fin de siglo no es algo que se escuche todos los días. Finalmente, después de meses de especulaciones, llegó la hora de ver a la famosa actriz protagonizando "Tomb Raider", el filme que da vida a uno de los juegos de computadora que más seguidores reunió en el mundo y que se estrena el jueves en Rosario. Filmado entre Islandia, Malasia e Inglaterra, el filme que dirigió Simon West ("La hija del general") completa su elenco con Daniel Craig, Iain Glen, Noah Taylor y el padre de Angelina, Jon Voight.
-¿Te ves convertida en Lara Croft en la imaginación popular?
-No lo sé, todo esto aún me sigue resultando un poco extraño. Estuve fuera de Estados Unidos durante un año, y mi sensación es que estuve en el ejército, viajando alrededor del mundo y haciendo todo este intenso entrenamiento físico. Cuando vi la película por primera vez fue como ver un video casero, porque me acordaba de los sitios en donde estuvimos filmando y las cosas que fueron pasando, como el día que nos entraron a robar en la casa en la que estábamos filmando. Toda esta experiencia ha sido muy extraña. Ninguna actriz quiere dedicarse exclusivamente a un solo personaje, pero al mismo tiempo sé que esta es una situación muy especial, porque este personaje me une mucho más a la audiencia que otros que he hecho.
-¿Es un personaje que te gustaría volver a visitar una y otra vez?
-Sí. Por una cuestión puramente egoísta. Si la vuelvo a encarnar voy a aprender diez nuevas técnicas, voy a viajar a tres nuevos países y voy a aprender sobre su historia y sobre su gente y voy a ir a lugares a los que no ha ido nadie, para poder entender algo más sobre los seres humanos. "Tomb Raider" fue una asombrosa aventura para mí, por lo que me siento muy afortunada de que me hayan elegido para ser parte de este proyecto.
-¿Estás preparada para el nivel de celebridad al quete llevará este filme si es que tiene el éxito que se augura?
-No, no sé si hay alguien que esté preparado para la celebridad, pero al mismo tiempo creo que es algo que no me tengo que tomar muy seriamente. Sencillamente voy a sentir que el mundo está lleno de amigos. De la misma manera en que Lara Croft se toma la celebridad. Ella también es una persona muy abierta y amistosa, aunque no esté muy bien de la cabeza. Supongo que si el nivel de fama es muy difícil de tolerar me conseguiré una psicóloga o algo así. Desde hace años que me vienen diciendo que me voy a volver terriblemente famosa y nunca fue tan terrible como me lo describieron. Nunca le presté atención a la fama y tampoco se la voy a prestar ahora.
-¿Cómo te convencieron para que hicieras de Lara? Me imagino que no eras una seguidora fanática del juego.
-Para nada, ni sé cómo se maneja una computadora. La primera vez que me hablaron del proyecto no sabía que el juego tenía tantos seguidores. Conocía el juego de antes, lo había visto, y hasta había intentado jugarlo una vez pero no pude.
-¿Es cierto que tu primer marido era un fanático de "Tomb Raider"?
-Sí, le gustaba. Pero también tenía uno de James Bond. Yo fui la primera que le dijo: "¡Pero mira los pechos que tiene, son ridículos!". Como cualquier mujer, eso fue lo primero que me llamó la atención de Lara Croft. Para la película la volvimos más atlética y le agregamos algunas otras cosas, pero básicamente es la misma del juego, es Lara Croft. No le quitamos demasiado... De todos modos, nunca me imaginé que el juego podía llegar a convertirse en una película para el verano. Además, la gente en Londres, todos los que trabajaron en el guión, construyendo los sets, la mejoraron muchísimo. La Lara Croft del cine es muchísimo mejor que la del juego. Basta fijarse en la casa en la que ella vive. Crearon este mundo tan alucinante y luego todos empacaron sus cosas y se fueron con nosotros a Islandia, en medio de un glaciar del tamaño de Gales. Después fuimos a Camboya, estuvimos en una región en donde nos teníamos que mover con muchísimo cuidado porque había minas enterradas por todos lados. Además de ser una película tan divertida como bien hecha, me enseñó muchísimas cosas a nivel personal que yo no sabía. Cuando Simon West me llamó y me propuso la idea, pensé que estaba completamente loco. Confieso que me sentí halagada, pero al mismo tiempo me pareció que la idea era ridícula. Y cuando me reuní con él esperando que me dijera que iba a ser lo que me parecía obvio, empecé a interesarme, porque el proyecto era muy diferente a lo que me había imaginado. No creo que sea una película estúpida. Creo que es una buena película. Simon me explicó que iba a ser un gran desafío, tanto para mí como para él, y que si yo aceptaba iba a tener que someterme a un intenso entrenamiento físico. Virtualmente me desafió para que me atreviera, y cuando agregó que íbamos a tener que viajar a todos estos sitios, y me contó el argumento, me di cuenta que ésta iba a ser una película de verdad, y que el personaje iba a tener visos de realidad.
-¿Si Lara Croft existiera, serías su amiga?
-Por supuesto. Me encanta ella como mujer. No la veo muy diferente a mí, más allá del hecho de que ella es británica y en ese sentido Lara es toda una señorita inglesa. Creo que odio más ponerme un vestido que lo que lo odia ella.
-¿Cual fue la escena mas difícil de rodar?
-Creo que las que filmamos en Islandia, por muchas razones. Hacía mucho pero mucho frío, y cuando estábamos en los botes, cruzando el lago, el agua estaba casi congelada. Los perros que llevábamos en los botes estaban muy enojados porque el agua les salpicaba. Me explicaron que si yo me caía en el agua, tenía cuatro minutos para que me rescataran, porque si no me iba a morir por congelación. Hubo ciertos momentos en esta película en los que me tuve que cuestionar que era lo que estaba haciendo ahí, si yo solamente soy una actriz. Eran situaciones válidas para una aventurera, no para una actriz. De todos modos, las escenas más difíciles fueron siempre las más gratificantes. Como por ejemplo cuando tengo que caminar hacia atrás en la escalera fue lo mas difícil de hacer porque al mismo tiempo tengo que recargar mis armas y disparar.
-En la película, Lara se reencuentra con su padre. ¿Te sentiste identificada con ella en ese aspecto?
-No del todo. Aunque todo el mundo sabe que mis padres se divorciaron cuando yo era pequeña, mi padre nunca estuvo ausente en mi vida, y nunca dejó de apoyarme. Pero uno siempre siente la necesidad de hacerle preguntas a sus padres. Para mí fue una gran experiencia tener esa escena con mi padre de verdad haciendo de mi padre en la ficción. Fue muy interesante poder trabajar con él. Nos hacía falta decirnos un montón de cosas, y algunas de esas cosas son las que nos decimos en la película. Hubo un momento en nuestras vidas en que Jon y yo nos reencontramos como padre e hija porque todos los padres e hijas tienen que reencontrarse. Por suerte ya éramos grandes amigos cuando hicimos esa escena juntos.
-¿Qué es lo que diferencia a tu Lara Croft de Michelle Yeoh y Zhang Ziyi en "El tigre y el dragón" y de Sigourney Weaver en las películas de "Alien"?
-Por empezar, creo que todas esas mujeres son asombrosas y me siento muy honrada que me haya tocado formar parte del grupo. En realidad, creo que estamos hablando de películas muy diferentes entre sí. En "El tigre y el dragón" y en las películas de "Alien" estas mujeres son puestas en una situación difícil que deben resolver y que detestan. Lara en cambio vive para experimentar esos momentos difíciles, eso es lo que la hace feliz. A Lara Croft le encanta el peligro. De todos modos, lo que Michelle Yeoh y Zhang Ziyi hacen en "El tigre y el dragón" me parece absolutamente asombroso y yo siento que no estoy en condiciones de competir con ellas. Lo que hacen es muy especial y evidentemente se han entrenado mucho para hacerlo. Nosotros hicimos lo posible para que "Tomb Raider" luciera real, ya que la película no está basado en algo real sino en un videogame. Cuando a mí me tocó correr por las paredes, hice todo lo posible para correr realmente por las paredes. Fue una escena muy difícil desde lo físico pero yo puse lo mejor de mí para lograrlo. Podríamos haber usado un truco cinematográfico, o efectos especiales, pero preferimos hacerlo real para que se viera real.
-Se nota que para hacer de Lara tuvieron que ponerte algo de relleno en el brassier...
-Es increíble la fascinación que tiene todo el mundo con el busto. Aunque Lara tiene muchísimas otras cosas que la identifican, la gente sólo se fija en sus pechos. La verdad es que yo tengo un poco menos de busto que Lara. Usé un brassier acolchado y dividimos la diferencia entre lo que tiene ella y lo que tengo yo. La hicimos físicamente mucho más atlética. Yo tengo una cintura mucho más grande que la de Lara. Ella tiene caderas muy redondeadas y las mías son un poco más masculinas. La Lara Croft de la película es mucho más atlética y tiene pechos más pequeños que la del videogame, pero sigue siendo Lara Croft.
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