Año CXXXIV
 Nº 49.164
Rosario,
domingo  01 de
julio de 2001
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Xcaret: Misticismo maya
La localidad mexicana fue por más de un milenio uno de los centros ceremoniales de la civilización aborigen

La localidad mexicana de Xcaret fue por más de un milenio uno de los principales centros ceremoniales de los mayas. En la lengua de este pueblo, Xcaret significa "pequeña caleta", y los mayas estaban convencidos de que las aguas del lugar sagrado purificaban el cuerpo y el alma. En la pequeña caleta tomaban baños rituales que los preparaban para navegar hasta la cercana isla de Cozumel, donde adoraban a Ixchel, la diosa de la fertilidad.
Pasó el tiempo y los mexicanos construyeron a 55 kilómetros de ese parque eco-arqueológico el balneario de Cancún. Y Xcaret, con sus peces de colores y sus ríos subterráneos, se convirtió en el lugar más visitado de la costa caribeña de México.
A uno de ellos se lo conoce como el río subterráneo -es el que fluye a unos seis metros por debajo de la tierra- y el otro es el río de los mayas. Navegarlos es disfrutar sólo del murmullo del agua y el canto lejano de los pájaros.
Pero más allá de la naturaleza, Xcaret tiene un auténtico rincón mexicano decorado con azulejos de talavera, donde hábiles jinetes realizan un show con caballos pura sangre. Un sitio para comer el tradicional mole poblano y las enchiladas, acompañados por tequila y las mejores cervezas del país. Este asentamiento maya tuvo su período de esplendor entre los años 1400 y 1517. Sólo algunas de sus ruinas fueron excavadas, restauradas y estudiadas, pero otras aún guardan sus misterios y se muestran, vírgenes, entre la espesa jungla.
El parque tiene una isla donde viven los jaguares y los pumas, felinos de cuerpos pesados y musculosos, y otra isla, la de los monos arañas, simios extraños que no tienen dedo pulgar y comen flores y hongos.
Los paseos organizados incluyen un recorrido por las cuevas donde viven los murciélagos, y por las caballerizas donde se crían los garañones y las yeguas portuguesas. De este apareamiento nacen potrillos negros que devienen en corceles blancos.
La nocturnidad en Xcaret es una mezcla de luces y sonidos que el hombre inventó para este paraíso natural. De noche, también, se llega hasta los sitios sagrados de los mayas, se pasa por un templo ceremonial y se escucha la música de danzas prehispánicas.



Por los ríos subterráneos de Xcaret se practica snorkel.
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