Año CXXXIV
 Nº 49.163
Rosario,
sábado  30 de
junio de 2001
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Recomiendan extremar precauciones
El Sies asiste diariamente a dos personas intoxicadas con monóxido de carbono
En lo que va de este año, ya se atendieron 17 casos más que los que se presentaron durante todo el 2000

El frío comenzó a mostrar sus dientes. Sólo en lo que va de este invierno, el Servicio Integrado de Emergencias Sanitarias (Sies) ya atendió un 50 por ciento más de intoxicaciones por monóxido de carbono o por inhalación de gas que los que asistió durante todo el año pasado. Los operadores del 107 reciben diariamente un promedio de dos pedidos de socorro por estos casos. Algunos llegan tarde: los pocos días gélidos que se presentaron en Rosario ya dejaron dos víctimas fatales.
En lo que va del 2001, los médicos del Sies ya asistieron a 48 personas que padecieron cuadros de intoxicación por monóxido de carbono o escapes de gas. La cifra supera con creces los 31 casos que se les presentaron el año pasado.
"En estos días tenemos un promedio de dos llamados diarios que, en jornadas muy frías, ascienden a cuatro o cinco", indicó el director del Sies, Omar Mattana.
Y a veces los médicos llegan al lugar cuando ya no hay nada que hacer. Según los registros de la división de medicina criminalística de la Unidad Regional II, este año ya produjeron los desesos de un hombre de 34 años y una mujer de 60. El año pasado, tres jóvenes de 16, 17 y 21 años, un hombre de 36 y un anciano de 74 perdieron sus vidas en este tipo de accidentes domésticos.

Una mala pasada
Al momento de explicar el aumento de estos accidentes, comúnmente se recurre al incremento de las condiciones de pobreza y la utilización de artefactos de calefacción precarios. Pero esto no siempre es así. Muchas veces la falta de mantenimiento de instrumentos correctamente instalados o algunas malas costumbres también pueden jugar una mala pasada.
"En nuestro servicio estamos acostumbrados a ver de los dos casos. Atendemos tanto a personas de condición muy humilde que encienden braceros, como a hombres y mujeres de clase media o alta que prenden su automóvil para calentarlo en el garaje y se quedan dormidos", apuntó el coordinador médico del Sies, Alberto Vidal.
Por esto, el profesional subrayó la necesidad de extremar las medidas de precaución al momento de aclimatar cualquier ambiente.


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