Marcelo Menichetti
El grupo rosarino Mundo Bizarro dará conocer el álbum "De noche el fuego" en un recital pasado mañana, a las 21.30, en el Teatro Príncipe de Asturias del Centro Cultural Parque de España, Sarmiento y el río Paraná, con entrada libre y gratuita. Fernando de la Riestra, el alma máter de la banda creada en 1995, aseguró que el grupo usa en sus canciones desde el rock hasta la música clásica, pasando por el bolero y otros géneros, y siempre dándole prioridad a las letras sobre la música. También adelantó que están por grabar un disco con Leo Maslíah, que vería la luz el año próximo.
"De noche el fuego" es una coproducción de la banda rosarina que integran Fernando de la Riestra, Irene Cervera, Rubén González, Armando Sabia, Maxi Ades y Lucas Dimare con la Editorial Municipal de Rosario. El álbum tiene 16 temas, todos con música de De la Riestra y letras del compositor y de los poetas Martín Gambarotta, Jorge Fondebrider, Martín Prieto, Daniel García Helder, Juan Gelman y Mario Ortiz.
Fernando de la Riestra es un veterano músico rosarino que recorrió el mundo como bajista de El Umbral. Se autodefine como un ecléctico por excelencia y participó en grupos dedicados a tocar covers de Los Beatles, como Socorro, o a la fusión con Jazzmanía.
"En los cuatro grupos en los que participo, aprendo y enseño algo", reconoce el artista que tomó la guitarra en 1994 para asociarse a Irene Cervera en 1995 para la génesis de Mundo Bizarro. El grupo se consolidó después con la inclusión de músicos locales que se sumaron a la propuesta.
-Mundo Bizarro reúne a músicos de distintas edades y vertientes.
--Sí, pero la edad mental es la misma en todos: es decir cuatro años (risas). Justamente eso fue una cuestión entre estratégica y afectiva que resultó muy bien. Uno nunca puede saber, con anticipación, cómo va a ser la química entre gente que no laburó nunca junta o en contextos diferentes. Pero a poco de andar nos dimos cuenta de que había una química muy especial en el grupo. En la contratapa de nuestro disco hay una frase que dice que a veces el clima de los textos es como si prefijara la música. Esto ocurre cuando el texto es previo a la música, como en muchos casos en el grupo.
-¿Qué pasaría si la música de Mundo Bizarro sugiere más cosas que las que expresa su letra?
-Bueno, si actuara como disparador yo creo que es un golazo de media cancha para el que lo hace...
-¿Cómo definiría sus composiciones?
-Son canciones, pero son canciones con emboscadas, con alguna trampa. En este momento en el que hasta las vanguardias están casi cuestionadas ideológicamente y me parece que está todo mezclado, yo no podría decir que la estructura musical de esto rompa de algún modo con algo, pero sí que hay una utilización de acordes que es muy libre en cuanto a que está abrochado a armonías del bossa nova, a cosas rockeras puras o a los Beatles, boleros y sabores heredados de la música clásica.
-¿Qué paralelo podría tenderse entre los distintos orígenes de los argentinos y un músico que toma un poco de cada lado para componer?
-El argentino en general, y el rosarino en particular, está en una especie de encrucijada muy interesante desde el punto de vista del creador. Porque de algún modo estamos expuestos a una cantidad de cosas que tienen que ver con algunas "tradiciones" y toda la problemática urbana. De esta música, si hay que definirla de algún modo, hay que decir que son canciones urbanas.
-¿Mundo Bizarro es una expresión de la música rosarina?
-Yo sí creo que es una expresión rosarina, urbana.
-¿Y el producto artístico será comprensible en otra geografía?
-Me parece que sí, aunque a veces busco zafarme un poco con ese tipo de presunciones. No hace mucho promocionamos un show diciendo: "Mundo Bizarro presenta un nuevo grupo de canciones bajo la consigna «Pinta tu aldea y te juzgarán en el Tribunal de Faltas»" (risas).
-¿Por qué compone con material propio y de otros poetas?
-Yo no me considero a mí mismo un poeta. Siempre fui una especie de armador de excusas para cantar y, si querés, creador de alguna instantánea, pero me encanta trabajar sobre los poetas porque me parecen que dicen de una manera mejor lo que yo pienso. Y por otra parte me da la impresión que esto permite plantear una emboscada: el lenguaje de los poetas tiene un nivel de condensación que en algún punto da la vuelta.
-¿Qué opina de músicos que trabajan con los textos como Leo Maslíah, por ejemplo?
-A Leo siempre lo admiré y ahora tenemos muy avanzado un proyecto de grabar un disco juntos a partir de los primeros meses del año que viene. Ya estamos seleccionando material y creo que existe una sensibilidad en común. Cuando lo escuché por primera vez y adherí absolutamente a su propuesta ya hacía unos años que yo estaba trabajando y él también. Pero recién empecé a charlar la posibilidad de poder hacer cosas juntos en el curso de este año. El producto será una conjunción de Mundo Bizarro con Leo Maslíah.
-¿La obra de Mundo Bizarro es un trabajo serio o son travesuras musicales y poéticas?
-Es un trabajo serio que tiene permanentemente concesiones al humor, a la ironía, sea ésta explícita, textual o musical. Yo lo tomo muy en serio, lo que no me gusta es esta impronta de seriedad pesada. No me gusta perder la posibilidad de sonreir o reirse francamente de uno mismo cuando esto se precisa. Pero no se trata de una broma musical.
-¿Son canciones con poder residual?
-Creo que así como no es una música de adquisición instantánea sino que es de instalación paulatina, requiere múltiples audiciones como para empezarte a dar cuenta de lo que se trata. Lo que se adquiere lentamente probablemente se vaya lentamente. Ojalá sea así.
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La Ciudad
