Un hombre de 40 años fue detenido la noche del martes sospechado de ser uno de los integrantes de la banda que, a fines de marzo, secuestró con fines extorsivos a Angel José Dolza, un estanciero de la localidad de Las Varillas. La situación del apresado se habría complicado tras una rueda de reconocimiento a la que fue sometido la mañana de ayer en la cárcel de Villa María, donde está alojado. En esa medida la esposa del estanciero secuestrado lo habría reconocido como uno de los autores del rapto, aunque su esposo no tuvo la misma certeza a la hora de señalarlo como su raptor, según trascendió de fuentes de la investigación.
En tanto, según una versión periodística no confirmada por voceros judiciales, la investigación policial habría establecido que los hijos de Dolza no serían ajenos al hecho, sino que podrían haber actuado como instigadores del secuestro. Esa hipótesis fue una de las primeras en investigarse debido a los problemas económicos por los que atraviesan Mario y Darío Dolza, los hijos del estanciero que a fines de 1997 ganó casi 6 millones de pesos en el Quini 6 y dejó de ser un simple panadero de pueblo para convertirse en un acaudalado dueño de campos.
Los mismos voceros dijeron que los rasgos del sospechoso detenido, identificado como Angel Rocha, coincidirían con los identikits elaborados con datos suministrados por el propio Dolza, su esposa y un empleado, quienes tuvieron contacto físico con los autores del rapto. Poco después de ser liberado, el fiscal que investiga la causa dijo al respecto que los secuestradores "serían cordobeses" por la tonada con la que hablaban y que tendrían "entre 40 y 50 años", datos coincidentes con el apresado.
Asimismo, fuentes judiciales explicaron que el domicilio del detenido, en la localidad de Cruz Alta (a 230 kilómetros de Las Varillas), coincidiría con las características de la casa donde estuvo cautivo el estanciero, según la descripción aportada por Dolza a la policía.
Voceros cercanos al fiscal de Villa María Francisco Márquez, quien comanda la investigación, confirmaron la mañana de ayer la detención de Rocha. Sin embargo, amparándose en un estricto secreto de sumario, se excusaron de confirmar o desmentir una versión periodística que indica que el sospechoso habría mantenido contacto telefónico con los hijos del empresario.
Al respecto, desde la misma fiscalía se explicó que los listados de llamados telefónicos que se constataron en las líneas fijas y celulares de Dolza y sus hijos "no aportaron nada importante a la investigación".
Camino al campo
Angel Dolza fue secuestrado la mañana del 29 de marzo pasado cuando a bordo de una camioneta 4x4 se dirigía junto a su esposa, Elba Depetris, y su empleado Eduardo Barbera, a su establecimiento rural del pueblo de La Playosa, a 50 kilómetros de su domicilio en Las Varillas. El campo lo había comprado con parte del dinero que ganó en el sorteo del Quini Seis del 15 de diciembre de 1997. Otra adquisición fue una estación de servicios en el centro de Las Varillas que puso a nombre de su hijo Darío. El resto del dinero sigue guardado en bancos de Córdoba.
Tras 26 horas sin que se sepa nada de Dolza, y sin que mediara algún llamado telefónico pidiendo rescate por él, el hacendado fue liberado en cercanías de la localidad santafesina de San José de la Esquina.
Por entonces, toda la policía cordobesa estaba tras los pasos del hombre secuestrado después que su esposa y el empleado que lo acompañaba efectuaran la denuncia por averiguación de paradero.
El diario La Mañana de Córdoba anunció ayer que el detenido integraría una banda de al menos otras cuatro personas que habrían mantenido contacto con los hijos del estanciero durante varios meses previos al rapto, pero la versión no fue confirmada ni desmentida por las fuentes judiciales.
Asimismo, el matutino mediterráneo añadió que el fiscal Márquez recibirá a fines de esta semana de los investigadores un informe de unas 400 páginas que contendrían pruebas en contra de los hijos de Dolza y su presunta vinculación como instigadores del secuestro.
En cuanto a las próximas medidas, tras el reconocimiento positivo que ayer habría hecho Elba Depetris, el juez que instruye la causa dispondrá para las próximas horas una medida similar en la que intervendrá el empleado que acompañaba al matrimonio Dolza al momento de producirse el secuestro.
La Ciudad
